¿De quién es la culpa de que un grupo de estudiantes repruebe una materia, del grupo o el profesor (a)? Al parecer, en esta escuela, la culpa es de la maestra Diane Tirado, quien fue despedida luego de que se negara a regalar mayores calificaciones a sus alumnos.

La profesora Tirado comenzó a trabajar en West Gate en Port St. Lucie, en Florida como maestra de historia para un grupo de octavo grado. Como parte de una de sus dinámicas de enseñanza, la maestra encargó a sus alumnos un proyecto para el que les dio varias semanas, pero, llegado el día de entrega, fueron pocos los estudiantes los que llevaron su tarea.

Vía Goodfullness

Dada la evidente molestia y decepción, la maestra Tirado quiso ponerle cero a aquellos alumnos que no entregaron su trabajo, sin embargo, la escuela tiene una política que prohíbe poner tal calificación, pues lo mínimo que puede hacerse es otorgarles el 50 por ciento de la nota.

Como la profesora Tirado no estuvo de acuerdo con esta política fue despedida en septiembre pasado, pero antes de irse dejó un mensaje a sus alumnos escrito en el pizarrón:

“Adiós niños. La maestra Tirado los ama y les desea lo mejor en la vida. Me han despedido por rehusarme a darles un 50% en un trabajo que no fue entregado“.

La historia de la profesora Tirado se ha vuelto viral en redes sociales, llamando la atención de otros profesores quienes aplauden sus acciones y el haberse negado a enseñar de esa manera. 

“La razón por la que tomé esta pelea fue porque era ridícula. La enseñanza no debería ser tan difícil. Los maestros enseñan contenido, los niños hacen las tareas de la mejor manera posible y los maestros califican el trabajo basándose en una escala de calificación que ha existido durante mucho tiempo. Los maestros también brindan numerosos intentos para que el trabajo sea recogido para que puedan darle una calificación a un niño. Por naturaleza, la mayoría de los maestros son almas amorosas que quieren que los estudiantes tengan éxito. Hacemos más allá de la enseñanza real para darles el apoyo que necesitan. ¿Somos perfectos? NO. Cometemos errores como todos los demás seres humanos, pero sé que los maestros trabajan duro para ayudar a los niños a ser las mejores personas que puedan ser, comentó Tirado a Goodfullness.

Este no es un caso aislado. Según reporta el medio, el profesor Lynden Dorval, quien enseñó física en Edmonton, Canadá, en la Escuela Ross Shepherd, también fue despedido por reprobar con ceros a sus estudiantes, sin embargo, tiempo más tarde fue contratado en un colegio privado.

Nuestra política de evaluación generalmente se deja en manos de los maestros. Creo que los estudiantes aquí no se sorprenderían de obtener un cero si no hicieran su trabajo“, dijo Peter Mitchell, director de la Escuela Tempo, quien contrató a Dorval.

¿Será que la responsabilidad de sacar buenas calificaciones se estará dejando en un 100 por ciento a los maestros?

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