El año pasado, Sam Cossman y George Kourounis se convirtieron en los primeros exploradores que se atrevieron a entrar en el cráter de Marum, uno de los volcanes activos más peligrosos e inaccesibles del mundo, ubicado en la Isla de Ambrym.
Con la supervisión de vulcanólogos descendieron 365 metros al interior del cráter por medio de una cuerda resistente al calor. Y es que en la parte inferior del volcán, conocida como la entrada al infierno, la temperatura puede alcanzar más de 1,000 grados centígrados.
Para grabar las escenas que están por ver, Cossman realizó dos expediciones y seis descensos al cráter, donde filmó varias escenas sorprendentes con ayuda de cámaras GoPro y drones.
A pesar de qué estas imágenes fueron grabadas hace un año, vale la pena verlas, pues como dice la descripción del video en YouTube: Más gente ha visitado la Luna que las profundidades de este volcán.
Simplemente hermoso… y peligroso.