Cuando uno piensa en el Día del Padre, lo primero que llega a la mente es nuestro progenitor, los recuerdos de la infancia y la manera en que han decidido celebrar esa fecha. Sin embargo, sólo ciertas personas se preguntan qué se sentiría estar en sus zapatos, lo mucho que tuvieron que luchar en la vida o cómo es que se convirtieron en el pilar que mantiene en pie a su familia.

¿Han pensado acerca de todas las cosas que cambian una vez que tienen hijos? Puede que así sea. De hecho, algunos hombres ven tal situación como un punto de transición en su vida, que básicamente define qué clase de individuo será ante una familia y a veces, frente al resto del mundo.

En Sopitas.com decidimos subirnos una vez más a este tren, sólo para mencionar algunas de las cosas que ningún hombre se haría antes de convertirse en papá u otras que sufren ciertos cambios. Si tienen algo de tiempo libre y mucha curiosidad, entonces sírvanse algo frío de beber, que vamos a comenzar.

Comienzas a cambiar pañales sucios

Antes de la paternidad, uno sólo tenía que preocuparse por su ropa socia y si a caso, por las gracias de su mascota. Tener hijos cambia todo eso, ya que uno desarrolla cierta inmunidad hacia los malos olores y a las visiones desagradables que sólo se pueden encontrar dentro de un pañal usado.

Hay que reconocer que no cualquiera tiene las agallas para limpiar ese tipo de cosas diariamente y seguir con su vida. Ya ni mencionar a aquellos sujetos que han sido orinados por sus bebés en pleno proceso.

Dices que no a cualquier evento social

¿Recuerdan todas esas borracheras épicas, partidos de futbol y tocadas a las que solían ir? Bueno, pues para la mayoría de los padres, tales cosas se quedan en el pasado. No hay tiempo de fiestas cuando necesitan vigilar la salud y bienestar de una o más pequeñas criaturas.

Con la llegada de los niños, aparece la responsabilidad de cuidarlos en todo momento. Eso incluye todas las ocasiones en las que el hombre quiera poner pausa a su vida para poder relajarse o distraerse.

Recibes el vómito de “buena gana”

Regresando al tema de las cosas asquerosas, convertirse en padre también conlleva aceptar con humor algo que nunca hubieran podido permitir de otras personas.

No es fácil recibir una vomitada de bebé en la cara o su camisa nueva y seguir sonriendo como su nada hubiera pasado. Si esa no es la prueba máxima de que aman a sus hijos con todo el corazón, entonces nada tiene sentido.

Te desvelas por razones diferentes a las de antes

En el pasado, la noche era un momento especial para festejar, prender una fogata, bailar, tener pláticas con los amigos, disfrutar de buena música, beber o sólo caminar en la oscuridad mientras reflexionaban acerca de sus errores. Cuando se convierten en papás, ésta pasa a ser la anfitriona de todos los desvelos relacionados con llantos de bebé o esas típicas conversaciones de por qué Chucky no está esperando a los niños en la oscuridad.

Tal vez nunca añorarán el poder dormir como lo hacen una vez que se convierten en los hombres de la familia.

Permites que rompan todas tus cosas

Dejemos a un lado el hecho de que todo individuo aprende a compartir sus pertenencias con los chamacos en ese punto de su existencia. Es más importante subrayar que los niños siempre llegan a destruir eso que ustedes cuidaban celosamente durante sus años más jóvenes.

¿Les gustaba mucho su disco de AC/DC firmado por el mismísimo Angus Young? ¡Pues ya lo rompieron! ¿Amaban su replica en miniatura del Halcón Milenario? ¡Destruido! No hay cosa que se escape de esas pequeñas máquinas trituradoras que muchos pequeños tienen por manos.

Conoces la sensación de ir al baño acompañado

Esto no aplica en la vida de todo padre. Sin embargo, hay casos en los que uno o más niños admiran tanto a su padre, que simplemente deben estar con él en todo momento; incluso cuando este tiene comió una docena de tacos al pastor y tiene que ir a hacer sus necesidades.

La televisión deja de ser tu elección

Se acabó aquel sagrado momento en el que se sentaban frente al cálido fulgor del televisor y se olvidaban del mundo. Ver Breaking Bad, Prison Break o How I Met Your Mother ya no será posible. Ahora tendrán que conformarse con programación del calibre de Uncle Grampa, Peppa Pig o Ben 10.

Los momentos de privacidad terminaron

De una forma muy similar al asunto del baño y la televisión, la paternidad sirve para que un hombre aprenda una cosa: la privacidad puede llegar a ser un privilegio y no un derecho. Ni siquiera el simple acto de mirar su teléfono sucederá sin ser monitoreado por pequeños ojos y cuestionado por mentes jóvenes y sedientas de conocimiento.

Dicho esto, les aconsejamos que cuiden muchísimo su historial web. No queremos que tengan que sufrir las consecuencias de que sus hijos conozcan la manera en que ustedes deciden eliminar el estrés causado por la rutina.

Ya no gastas tu dinero en lo que quieres

Antes de convertirse en padres, muchos hombres dan el 200% de su esfuerzo en la chamba para así poder comprarse lo que deseen, ya sea un videojuego nuevo, ropa de marca o lo que sea. Luego aparecen los bodoques y todo cambia drásticamente, porque ellos también merecen vivir una infancia decente y esas cosas.

Los videojuegos ya no serán para su disfrute personal, sino para los chiquillos; ya no pueden pensar qué pantalón se les verá mejor, porque ahora hay que comprar uniformes de primaria; ya no habrá noche de pizza y chelas porque de ser así, ¿quién se va a encargar de la despensa?

Te preocupas por un futuro que no es el tuyo

Aquí las cosas se pueden ver desde un punto de vista positivo.

Antes el mundo sólo giraba alrededor de lo que ustedes querían y ningún otro ser humano merecía un segundo de su tiempo que no estuvieran dispuestos a gastar. Pero las cosas son muy diferentes una vez que se trata de cuidar la vida de seres vulnerables y sumamente dependientes.

No vamos a mentir, convertirse en papás no es precisamente lo que anhelan todos los hombres en el mundo, pero también es un proceso que trae cosas muy bellas en la existencia de algunos. Tan sólo piensen en su propio padre, cuya vida no se arruinó por educarlos, verlos crecer o servir como un modelo a seguir.

Si es posible, den un abrazo fuerte a ese gran sujeto y beban una cerveza con él.

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Comentarios