Aún en pleno 2015, continúan existiendo muchos prejuicios entorno a las personas con síndrome de Down. Afortunadamente cada vez son más las historias de derriban estas ideas, como la de Collin Clark.
Collin es un chico con Síndrome de Down, que a sus 22 años está por cumplir uno de sus mayores sueños: Competir en un evento de fisicoculturismo. Aunque para lograrlo ha tenido que esforzarse y trabajar muy duro por más de dos años.
Así, apoyado por el fisicoculturista y entrenador personal Glenn Übelhör, Glenn se sometió a una estricta dieta, así como a un intenso entrenamiento que lo llevó a bajar alrededor de 30 kilos.
Obviamente en todo este tiempo también pasó por momentos difíciles, aunque no por eso desistió de su objetivo.
Aquí el resultado:
Al ser entrevistado por la cadena NBC, Glenn mencionó:
“Me siento muy bien. Estoy tan feliz de estar haciendo esto. El culturismo está en mi sangre y yo siempre quise hacer esto desde que era un niño”.
Sin duda todo un ejemplo que todos debemos seguir. Alcanzar nuestras metas y sueños cuando trabajamos duro por ello.
¡Quihubo, y yo que no puedo bajarle a la panza chelera!