Cuando uno ve películas como las del Planeta de los Simios, encontramos muy exagerada la idea de que algún día otra especie animal pueda llegar a conquistar la Tierra.
Sin embargo, si esto llegara a suceder, probablemente nuestros parientes más cercanos podrían ser los responsables de nuestra caída. Y para muestra un botón:
No sabemos si alguien le gritó algo ofensivo (tal vez le recordaron a su changa madre) o le quitó su comida, pero esto chango marango arremetió contra todos y lanzó parte de sí mismo a la tribuna.
Y qué tino, ya que el pedazo de porquería aterrizó exactamente en la nariz de una pobre abuelita que confundida por lo ocurrido, no pudo más que contemplar el marrón objeto sobre su cara.
Como podemos notar, el simio quedó bastante satisfecho con su fechoría y no dudamos que alguien más cayera víctima de sus arrebatos intestinales.
Pues ya saben, cada vez que vayan a un zoológico y visiten el recinto de los chimpancés traigan una máscara para evitar ser rociados por las gracias de estos animales.
