Hoy estamos celebrando que se han cumplido ya 45 años de la primera emisión de El Chavo del 8, una serie que no sólo tiene un lugar especial en el corazón de las personas de muchas generaciones, sino que también ha tenido una gran presencia en la cultura popular latinoamericana durante muchos años.

Por eso es que hoy tomamos un rato de nuestro tiempo y a la vez, del suyo para poder explicar por qué es que el Chavo es tan importante tanto en el país como personaje, e incluso en toda América Latina.

Bueno, como ya varios de ustedes saben, la serie del Chavo fue creada y protagonizada por Roberto Gómez Bolaños, conocido también como “Chespirito”. El 20 de junio de 1971 fue emitida por primera vez y más que nada nos cuenta las graciosas vivencias de los personajes que habitan en una vecindad mexicana.

En esta, nuestro protagonista, el Chavo, pasa su día jugando y haciendo travesuras junto a sus amigos, lo que casi siempre terminaba en varios malentendidos y desastres entre los vecinos.

 

Toda la idea surgió de un sketch que Gómez Bolaños escribió, en el cual un niño pobre de 8 años discute con un vendedor de globos en un parque. Pero pasó rápidamente de ser un segmento de Chespirito a convertirse en una serie de media hora de duración y a transmitir un episodio a la semana en horario estelar. Se podría decir que El Chavo del 8 vivió en una muy buena época de la televisión en México.

Su popularidad le permitió ser transmitida para cuando Telesistema Mexicano y Televisión Independiente se juntaron para formar lo que hasta ahora conocemos como Televisa. Apenas dos años después de su lanzamiento, la serie del Chavo ya se transmitía por toda Hispanoamérica y contaba con altos índices de audiencia televisiva.

Para 1975, la serie era vista por más de 350 millones de televidentes cada semana, por lo que era normal que obtuviera entre 55 y 60 puntos de cuota de pantalla. El elenco de El Chavo ya era tan famoso para 1977, que comenzaron a hacer giras por otros países como: Chile, Argentina, Perú, Estados Unidos y muchos otros. Incluso habiendo terminado el programa, varios de los actores tuvieron mucha fama de manera independiente gracias a su inmensa popularidad.

El hecho de que la serie poseía una inocencia especial que otras no han logrado a lo largo de los años, es uno de los grandes factores que permitieron que El Chavo del 8 se ganara el corazón de chicos y grandes. El éxito del programa fue tan grande, que no encontramos extraño que haya sido traducida a más de 50 idiomas para ser vista por muchos países.

Pese a la partida de Gómez Bolaños, El Chavo sobrevivirá no sólo como un personaje muy querido, sino como una marca cuyos derechos incrementarán su valor con los años. Claro que es mejor recordarlo como la serie que muchos de nosotros nos sentamos a ver sin excusa durante las tardes de nuestra niñez.

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