El mundo está lleno de misterios que todavía no podemos resolver, sobre todo sin son casos causados por circunstancias extremadamente extrañas. Tomemos como ejemplo el último episodio en las aventuras de las modelos de Playboy, que, mientras estaban relajándose en su mansión, tuvieron una visita algo “salvaje”.
Modelos asustadas vs canguro furioso
Para poder entender qué rayos pasó, tenemos que agregar algo de contexto: Hay un sujeto llamado Travers Benyon, que básicamente es como la versión australiana de Dan Bilzerian. Es igual de abundante económicamente y, como podrán imaginar, siempre está rodeado de atractivas modelos de Instagram.
Ok, tal vez Dan sea mejor parecodo que él, pero la actitud es lo que cuenta.
Bueno, pues mientras estaba cotorreando con las chicas en Costa Dorada, en Australia, las acompañó a una sesión de fotos en la mansión playboy de las cercanías. Todo iba de maravilla para estas señoritas, hasta que de la nada apareció un marsupial furioso que no era fan de las modelos, de las fotografías de Instagram ni de la humanidad en general.
El animalejo, lleno de salvaje ira simplemente se abalanzó sobre las indefensas mujeres, que llenas de pánico, corrieron para salvarse de un ataque. Una cámara de seguridad colocada en un lugar seguro tomó un video breve del acontecimiento y, bueno, este tardó poco tiempo en llegar a todo tipo de plataformas de internet.
“Fue una tarde relajante en la Candy Shop Mansion, donde un grupo de chicas tomaba fotos en el patio trasero cuando Spartacus, el perro guardián residente, vio un canguro, cumplió con su deber y lo persiguió”, dice el video de YouTube. “El canguro huyó por el costado de la Mansión con Spartacus mordiéndole los pies. En este momento, Skippy se dio cuenta de que era mucho más grande que Espartaco y no iba a dejarse amedrentar. Así que rápidamente se detuvo, se dio la vuelta, se puso de pie y luego persiguió a Spartacus y a las chicas que gritaban por el patio trasero”.
Acá está una versión en Instagram con el tema de ‘Jaws’, por si al video de YouTube le faltó dramatismo:
De una forma u otra, nadie salió gravemente herido al final de esta historia. El canguro pudo desahogar su furia mientras corría y las modelos se pusieron a salvo. Solamente Spartacus quedó en ridículo tras haber huido en la línea del deber, pero se le perdona porque, vamos, nadie en su sano juicio se aventaría un tiro con tremendo animal.