Ya sea rifándose el físico en esa disciplina extrema que es el parkour o simplemente caminando por la calle, un guamazo en la boca tiene consecuencias odontológicas…
Para “suerte” de este post, el golpe que se registró en este video se trata del primero de los casos. Al ejecutar uno de sus saltos mortales, un joven no recordó que su boca no tiene el mismo agarre que sus manos y pese a que le propinó una buena mordidota a la estructura en la que pretendía caer… pues nomás no sirvió de mucho.
El resultado de tal maniobra es una urgente visita al dentista.