Quienes somos desorganizados, descuidados, desordenados, ‘al ahí se va’… siempre encontramos una que otra sorpresa de bajo de nuestras camas, dentro de los sillones, de bajo del asiento del auto o en el fondo de nuestro armario días, meses o hasta años después. Muchas veces nos alegramos porque encontramos el maldito control remoto del televisor, pero en ocasiones también nos llevamos la no grata sorpresa de encontrar el medio sandwich de tinga de pollo que dieron en el cumpleaños de tu sobrino hace 7 meses, y ya saben… el olor, los hongos, la consistencia, y la apariencia no es nada, nada agradable.
Pues bueno, Jennifer Lovdahl, una mujer de Alaska, seguramente no conoce la tinga, pero sí la comida rápida que infesta realmente a gran parte del mundo. Ella ha compartido unas increíbles fotografías de una ‘cajita feliz’ de Mc Donald’s que asegura haber guardado por más de 6 años. Y cabe aclarar que no porque fuera una desordenada, sino que ella misma quiso hacer el registro de dicho experimento para mostrársela a sus paciente -debe ser nutriologa-, y mostrar lo peligroso que puede resultar dicha comida para los más pequeños.
En las fotografías se puede leer la fecha en que se compró la cajita, la cual señala que fue el 8 de enero del 2010, hace 6 años… más de la mitad de una década, y aun así los nuggets y las papas parecieran venir de apenas hace una semana, máximo un mes. De ser correcto y verdadero esto, sorprende mucho ver que de plano no se nota algún indicio de descomposición natural, ya saben… como cualquier cosa ‘supuestamente’ comestible.
A decir verdad a nosotros nos parece casi imposible de imaginar, o mejor dicho… nos cuesta mucho aceptarlo; pero bueno, seguro es porque es Alaska y el país en sí es un refrigerador enorme, así que no echemos la culpa a esas papitas y excelentes ingredientes que sólo Mc Donald’s logra hacer.
It’s been 6 years since I bought this “Happy Meal” at McDonald’s. It’s been sitting at our office this whole time and…
Posted by Jennifer Lovdahl on Miércoles, 3 de febrero de 2016