Hace unos días dimos un recorrido por el renovado MUFO, Museo del Futuro, una asombroso viaje inmersivo, cuya misión es conectar nuestros sentidos con el conocimiento, el arte, y la tecnología, todo en un mismo edificio. Y aunque el año pasado la selección de obras fue espectacular, en 2023 la apuesta es más grande, ya que no solo se exhiben ocho piezas, sino también habrá una multitud de eventos, conferencias, laboratorios gastronómicos y talleres que acompañan las propuestas visuales.
Desde su primera edición, el MUFO se ha convertido en uno de los lugares favoritos de los capitalinos. No sólo porque nos hace repensar el significado de los museos, sino porque nos permite comprender de una forma didáctica –llena de colores, bioarte e Inteligencia Artificial– las infinitas formas que puede adquirir el arte cuando se complementa con disciplinas científicas.

Una visita a este recinto es equivalente a subirse a una máquina del tiempo y navegar por diferentes atmósferas rumbo a lo que viene, o mejor dicho a lo que creemos que viene. La intención es comprender juntos que en el futuro debemos ser los protagonistas de nuestras experiencias. O como nos lo anuncian en la entrada:
“Este es un espacio para que juegues con el potencial de lo que podemos ser, que inspire en tu mente la ilusión del futuro hoy…”.
¿Qué ver en el MUFO?
Para esta edición, MUFO ha reunido diversas propuestas, nacionales e internacionales, que desafían lo que sabemos del arte y la tecnología. Cada autor ha intervenido un espacio de este inmueble, ubicado en la Colonia Tabacalera, con una preocupación y una propuesta visual distinta, por demás revolucionaria.

Aquí todas las exposiciones están asociadas entre sí gracias a los efectos de la luz, el movimiento y el sonido. Eso permite que cada lugar, por pequeño que sea, estimule nuestros sentidos y nos haga comprender la poética más profunda de los artistas contemporáneos.
Desde un cuarto rojo que nos hace pensar en la inmensidad, hasta un pequeño paraje oscuro donde podemos ser testigos de cómo las bacterias se convierten en rayos láser gracias a la Inteligencia Artificial, la travesía por sus salones interconectados es asombrosa.
En 2023, gracias al apoyo de Spotify, podremos jugar también con el sonido y su efecto en los objetos y en los humanos. Por ejemplo, podemos interactuar con un artefacto, tipo tocadiscos, que reproduce de forma aleatoria y sincronizada los sonidos más icónicos de la Ciudad de México.

Por si lo anterior fuera poco, la clásica tienda de regalitos no se parece a la de ningún otro museo. Ofrece una colección de piezas únicas hechas por artesanos y centradas en la sustentabilidad y el comercio justo. Durante nuestra visita lo que más llamó nuestra atención fue una almohada gigante en forma de mano para los que no quieren dormir solos.

Nuestras salas favoritas del Museo del Futuro
Dicho todo lo anterior, aquí les dejamos lo que más nos gustó en el recorrido que nos dieron. Hemos seleccionado tres momentos asombrosos que nadie debe perderse.
Penique Productions
España
Se trata de un colectivo que desde el año 2007 ha centrado su atención en crear instalaciones inflables y efímeras de gran formato, en muchos lugares del mundo.

Para esta pieza en particular se infló y desinfló un globo inmenso que convirtió cada recoveco, de un cuarto de 3,200 metros cuadrados, en un universo de pliegues y texturas monocromáticas que nos invitan a pensar en la subjetividad de los espacios y nos generan cierta introspección en el rojo más absoluto.
Al entrar, sin zapatos, cada quien es tan grande o pequeño como se imagine.
La galaxia de Shoplifter
Islandia
Para los que no la conozcan, Shoplifter es una de los artistas conceptuales más extrañas y simbólicas de nuestros días. El eje central de sus piezas, casi siempre son instalaciones y esculturas hechas de cabello. Para ella el pelo es una fibra que nos distingue como individuos y nos permite reflexionar sobre nuestra vanidad y demás mitos de belleza que nos ha impuesto la sociedad.

En Galaxia, la islandesa nos sumerge en un cuarto plagado de fibras de múltiples colores que sobresalen de las paredes y del piso de una forma exuberante. Al entrar en esta habitación peluda que es a la vez morada, roja, azul, blanca y amarilla nos sentimos ligeros y contenidos, como si pudiéramos dejar toda nuestra existencia dentro de un abrigo.
Las esferas cromáticas de Light Node Cult
Ciudad de México

A través de un grupo de proyecciones inspiradas en la teoría de la luz de Goethe, los visitantes de esta sala pueden interactuar, a través del movimiento y del sonido, con las sombras y los colores dispersos en un gran salón tapizado de pantallas gigantes. La intención es llevarnos al agua y a la tranquilidad que nos transmite este elemento cuando nos acercamos a él

Dónde está y cuánto cuesta ir a MUFO
- El museo estará abierto al público a partir del 25 de mayo.
- El costo de los boletos de niños de 4 a 12 años es de $150, y la entrada general es de $300.
- Dirección: Antiguo Hotel Reforma, París 32, Colonia Tabacalera
- Abrirá de lunes a domingo en un horario de 11 a 7:30m
- Para comprar tus boletos, entra aquí