Mientras constantemente escuchamos comentarios sobre lo difícil que es vivir del arte y sus derivados, un artista llamado Ali Sabet logró encontrar alojamiento gratis en Tokio gracias a sus pinturas.
Todo comenzó cuando Sabet viajó a la capital de Japón y se hospedó en una pequeña casa disponible en airbnb en el barrio de Shibuya. Antes de irse, el dueño de la casa le hizo a una propuesta bastante interesante: si él pintaba algo en las paredes de su hogar, le devolvería el dinero de su estadía y además, el artista podría regresar cuando quisiera para hospedarse gratis.
Este fue el resultado de los murales que Ali dejó en Tokio
¿Creen que fue un trato justo? De todos modos parece que en esta historia ambas partes quedaron felices y ya hasta amigos son. Para que vean que no se muere de hambre en esta bonita profesión. Si quieren ver el proceso de creación les dejamos el video aquí abajo.