Con los emojis de WhatsApp y otras plataformas convirtiéndose en un fenómeno cultural, ya no nos es extraño encontrarlos en casi todos lados. Vaya, hasta una película basado en esto pictogramas vamos a tener.
Ahora, hasta en la arquitectura han logrado infiltrarse, si no vean el trabajo del arquitecto Changiz Tehrani, quien diseñó un edificio en la ciudad holandesa de Amersfoort:
En vez de gárgolas de piedra o musas inspiradoras, Tehrani adornó la fachada de este edificio con los emojis de emociones clásicos de WhatsApp.
Esta decisión, la tomó junto con los demás miembros del despacho de arquitectos en donde trabaja. Este muchachón escogió 22 de los emojis más expresivos y reconocibles.
El edificio de ladrillos rojos está localizado enfrente de una escuela, lo cual agrada mucho a Therani, quien siente que de esta manera, los niños pueden ganar interés por la arquitectura.
Y bueno, para muchos, esto tal vez le pueda restar seriedad a esta obra arquitectónica. Sin embargo, la cultura es algo que avanza constantemente y no se queda fija en una época o tendencia.