Durante esta cuarentena han surgido un montón de héroes sin capa, personas que están ayudando a su manera en estos momentos tan complicados. Desde los médicos que arriesgan su vida para salvar miles de pacientes con coronavirus, hasta quien usa su talento para distraer a los demás, como un joven que prefiere leer cuentos a niños para que tengan un poco de alegría en estos momentos.

Esta es la historia de Percibald García, un arquitecto habitante de Tlatelolco que está haciendo algo espectacular por todos los pequeños que viven en el desarrollo habitacional. Resulta que desde que todos aquellos están encerrados en sus departamentos, este joven decidió dar una vuelta por cada uno de los edificios del complejo para contarles un montón de historias.

Una de las marionetas que utilizan para contar sus historias en la Plaza de las Tres Culturas/ Foto vía Facebook: De La Casa A La Plaza: Narraciones Para Tlatelolco

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El suceso que lo motivó a contar cuentos

De acuerdo con El Heraldo, tras el sismo del 2017, este joven trabajó en un proyecto social para apoyar a la comunidad de San Simón el Alto, en MalinalcoEstado de México. Varios grupos de personas se sentaron a discutir sobre la reconstrucción de la escuela y todos dieron su opinión al respecto, todos menos un grupo: los niños que diario estudian en ese lugar.

A partir de ahí, Percibald comenzó a visitar San Simón el Alto con el único fin de leer cuentos e historias fantásticas a los pequeños. Sin embargo, y como ya sabemos, la pandemia del coronavirus lo obligó a cancelar los planes de viajar hacia aquella comunidad para continuar con su labor, pero también se dio cuenta de que en Tlatelolco podía hacer exactamente lo mismo por los niños que están en cuarentena.

Percibald y una de sus acompañantes caminando con su bocina por Tlatelolco/ Foto vía Facebook: De La Casa A La Plaza: Narraciones Para Tlatelolco

“Alguna vez estando con mi mamá en el edificio Hidalgo, escucho cómo un vecino, un niño, salió a su ventana y gritó: ‘estoy aburrido’, explica el arquitecto, quien cuenta que en esta unidad conoció un montón de historias gracias a su abuela, quien le contaba lo ocurrido en cada uno de los rincones de este complejo. 

Motivado por lo que hacía en San Simón el Alto y tomando como inspiración las historias de su abuela, el joven creó De la casa a la plaza: Narraciones para Tlatelolco, un proyecto abierto para todos los que estén interesados que consiste en pararse en las plazas públicas de este conjunto habitacional y simplemente leer para los niños.

Así es como le cuentan los cuentos a los niños/ Foto vía Facebook: De La Casa A La Plaza: Narraciones Para Tlatelolco

A veces lo más simple es lo mejor

Con tan solo una bocina, un micrófono y unas pocas marionetas, este joven se para afuera de los edificios para contarle cuentos a los pequeños e interactuar a la distancia con ellos, quienes desde sus ventanas o a metros de distancia escuchan sus historias. Según Percibald, el objetivo es que sepan que hay alguien que los escucha y que quiere compartir experiencias con ellos.

A la causa de Archibald, se han unido un montón de mujeres y hombres que como él también viven en Tlatelolco y quieren ver contentos a los más pequeños en esta cuarentena. Entre las 3:30 y 6 de la tarde, el arquitecto y las personas que se sumaron a esto caminan por toda la unidad habitacional, para que así ningún pequeño se quede sin su cuento diario. 

Foto vía Facebook: De La Casa A La Plaza: Narraciones Para Tlatelolco

Además de leer y compartir historias con los niños, en su página de Facebook compartieron las instrucciones para seguirlos por todo Tlatelolco. Según lo que dice la imagen, diario escucharán una canción y un cuento, pidiéndoles que se asomen para seguirlos con atención. También explican que las historias se contarán en diferentes puntos de la unidad habitacional, así que les piden que no se desesperen.

Los niños están más que contentos con los cuentos

Por si esto fuera poco y a través de sus redes sociales, los pequeños pueden volver a escuchar todas las narraciones, invitándolos a que les cuenten qué fue lo que imaginaron con estas historias. Y para terminar, también le piden a los niños que compartan sus cuentos favoritos a través de videos.

No cabe duda de que a veces solo se necesitan algunos cuentos o historias y el talento para llevarle alegría a los demás en tiempos tan complejos como los que estamos enfrentando. Y claro, los niños agradecen por completo lo que Percibald está haciendo por ellos.

Una de las tantas cartas que los niños envían para agradecer los cuentos/ Foto vía Facebook: De La Casa A La Plaza: Narraciones Para Tlatelolco

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Me llamo Jesús pero todos me dicen Chucho. Me encanta la música y sé tocar algunos instrumentos, aunque creo que soy mejor escribiendo sobre las bandas que me gustan. Soy fan de los conciertos y festivales,...

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