Una de las peleas que más se dan en la época del regreso a clases, en el caso de la UNAM, es la de saber si son más inteligentes los alumnos que usan pase reglamentado para poder estudiar alguna licenciatura en la “Máxima Casa de Estudios” -el cual obtienen al estudiar en alguna prepa de la UNAM y con ciertos requisitos como el promedio-, o bien, los que se preparan con meses de anticipación para el ya conocido examen de admisión.
Ahora, una pregunta seria: ¿Podrías contestar bien estas preguntas del examen de admisión al nivel Licenciatura de la UNAM? 🤔🤔🤔https://t.co/phQkBbPSF7
— Sopitas (@sopitas) January 20, 2019
Algunos afirman que los que tienen pase reglamentado tienen la vida comprada porque prácticamente, sin hacer nada, ya tienen un lugar en la universidad. Otros mencionan que ese esfuerzo lo hicieron al entrar al bachillerato y que es algo ganado.
La realidad es que una chica que realizó el examen de admisión perfecto ha demostrado que es bien cierto eso de “querer es poder”, pues cuando deseas entrar a la universidad puedes hacerlo de la manera en la que prefieras hacerlo y que fallar una vez no significa que no puedas volver a intentarlo y salir victorioso en ese nuevo intento.
Se trata de Vannia Estefanía Avelar Labra, una alumna de la Prepa 3 Justo Sierra, de la UNAM, que hace poco tuvo que lidiar con el hecho de no poder usar su pase reglamentado porque el promedio que tenía no le alcanzaba para entrar a la Facultad de Medicina, en donde quería estar para cumplir su sueño de estudiar la carrera de médico cirujano.
Sin embargo, esta chica se lanzó a la aventura de hacer el examen de admisión para dicha licenciatura. Aunque en la primera vuelta no lo consiguió, Vannia no se dio por vencida y presentó la segunda vuelta de la prueba de admisión, en la que logró un puntaje perfecto al contestar bien las 120 preguntas, con las que consiguió uno de los 39 lugares que la UNAM ofertó este año en dicha carrera, la cual quiere estudiar porque le motiva el tener la capacidad de brindar bienestar a las personas.
Cabe mencionar que este gran logro de Vannia no fue obra de magia o un golpe de suerte, en realidad fue el esfuerzo de una estudiante “normal” que tuvo meses de estudio intensos. La chica mencionó al portal de la UNAM que llevaba estudiando desde septiembre de 2018 y que se preparó intensamente con un curso intensivo de dos meses. “A esto es a lo que quería llegar y sólo me esforcé para obtenerlo”, dijo. “Habrá días en que no te crees capaz pero no siempre será así”, mencionó.
Y si bien dicen que “lo difícil no es entrar, es salir”, Vannia asegura que el hacerse dos horas hasta la facultad serán un reto (muchos sabrán de lo que habla), pero que al final el vivir lejos de donde estudiará no será un obstáculo, ya que al fin y al cabo esto es lo que anhelaba y está lista para lo que venga en los próximos años. ¡Esa es la actitud, chavos!