A estas alturas del confinamiento, y desde que empezó la pandemia, los ancianos son el sector de la población más vulnerables, razón por la que los mantenemos en completo aislamiento sin que siquiera asomen las narices a la calle. Pero ya saben lo que dicen: “Más sabe el diablo por viejo que por diablo”, y esta abuelita, no fue la excepción, ya que se las ingenió para disfrazarse de unicornio y así poder abrazar a sus nietos luego de 70 largos días sin verlos. ¡El mejor cosplay del mundo!
Maureen Sweeney, de 74 años de edad, es la abuela de los niños Rylan y Lincon. La familia vive dentro del mismo vecindario de Nueva Jersey, Estados Unidos, no obstante, a pesar de la cercanía la crisis sanitaria por COVID-19 los había obligado a mantenerse separados desde mediados de marzo del 2020.
Para Sweeney parecía que los días eran eternos, por lo que tuvo una increíble idea. Compró y desinfecto un súper disfraz de unicornio rosado, el cuerno rojo y los mechones de colores, con el que sorprendería a su familia. En complicidad con su hijo Hugh Dillon, quien grabó todo y subió la historia a su Instagram, la abuelita se dispuso a caminar unas cuadras con su innovador traje de protección.
Sus nietos de cuatro y siete años, corrieron hacia ella una vez que escucharon su voz a través del disfraz. El más pequeño estaba atónito, por la expresión de su cara, se nota que no podía creer que su abuela tuviera semejantes poderes para convertirse en un personaje mitológico.
El feliz trío no pudo esperar ni un segundo más para compartir un gran abrazo grupal, la emotiva escena quedó capturada para la posteridad, tal como se puede apreciar en el vídeo que verán más adelante, el cual puede servir como mensaje de aliento para todas las abuelas del mundo que han esperado tanto para volver a reunirse con los suyos, asegurándoles que todo lo que han hecho por estar a salvo valdrá la pena con tal de seguir juntos.
“Vine pensando en alguna forma de lograr tener contacto corporal, porque eso es algo que extrañamos mucho con mis nietos”, menciona Maureen en el vídeo. Y todo parece indicar que el disfraz cumplió con su función, pues Sweeney dijo que “Fue algo mágico, increíble”, recoge El Comercio. Aunque no es la única persona poniendo todo su ingenio para poder ver a sus seres queridos (recientemente, una niña de 10 años creó una cortina de abrazos para poder estar cerca de sus abuelos), sin duda es de las cosas más hermosas que hemos visto.