El internet es un lugar donde podemos encontrar historias de todo tipo, desde aquellas que nos revuelven el estómago del coraje, hasta una que otra que tiene la capacidad de ponernos a llorar a moco tendido. Y es justo de este último punto del que queremos hablar hoy, porque después de tanto años y a pesar de vivir relativamente cerca, una abuelita conoció el mar y por supuesto que está enterneciendo a mucha gente.
Hace algunos días se hizo viral la historia de doña Manuelita, una señora de 97 años originaria de Mérida, Yucatán. Resulta que así como muchas otras personas, esta mujer no había tenido la oportunidad de pisar una playa, sentir la arena en sus pies y ver la inmensidad del agua –por razones que desconocemos y aunque vivía en uno de los estados con las playas más bonitas de nuestro país–, pero eso cambió hace un par de días.
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La tierna reacción de este abuelita al conocer el mar
De acuerdo con lo que comenta Stephanie Flores, la bisnieta de esta abuelita en su cuenta de Facebook, la señora actualmente se encuentra en Cancún, Quintana Roo, lugar al que tuvo que mudarse para que sus familiares la pudieran cuidar mejor durante la pandemia. Pero en vista de que poco a poco los establecimientos públicos y privados fueron reabriendo, y había oportunidad de sacarla a pasear, decidieron que el primer sitio al que tenía que ir era la playa.
Con un huipil, Manuelita se sentó en una banca de madera y admiró el mar con sus propios ojos. Por supuesto que no pudo ocultar una enorme sonrisa, aunque también se le vio reflexiva en ese momento, mirando hacia el horizonte y sorprendida por lo que estaba viendo. Y sí, las imágenes están conmoviendo hasta las lágrimas a miles de personas, sobre todo por la tierna reacción que tuvo al estar por primera vez en la playa.
La bisnieta también mencionó a medios locales que durante esta única visita a la playa no pudo aguantar soltar las de cocodrilo cuando vio a doña Manuelita admirando el mar. “Esas imágenes dicen más que mil palabras”, comentó Stephanie, quien también describió a su abuelita como una mujer muy hermosa y sincera que dio todo en vida, así que lo menos que podía hacer por ella era darle un regalo como este, y estamos seguros que nunca lo olvidará.