Habrá que hacer que la chaviza vea y revise Búsqueda Implacable; primero, para que no cometan los mismos errores que la adolescente cuyo rapto hizo despertar la furia que Liam Nesson traía guardada y, segundo, en caso de ya regarla, para aplicar y mejorar las técnicas para que su rescate sea realizado lo más pronto posible; tal y como ocurrió con la protagonista de esta historia que pudo haber acabado en tragedia.
Todo sucedió en Australia, pacífico país en el que Mary Kate Heys, de 20 años, se encontraba viajando y, luego de conocer a un sujeto que se hospedaba en el mismo hostal que ella, dijo: ¿pues por qué no habría de subirme a su carro? La respuesta llegó muy rápido, cuando el gandalla tipo comenzó a conducir en dirección contraria al destino programado, sin dar chance a la chica de bajarse del vehículo.
Por fortuna, en lugar de caer en pánico, Mary Kate tomó screenshots de su localización en Google Maps y comenzó a mandárselos a su padre, quien se encontraba campechaneándola en Inglaterra: “Necesito que llames a la policía de Australia. No me llames”, “me secuestró un sujeto… por favor, apresurate”, texteó la chica.
Bueno… hay que decir que la astucia del agresor no era muy alta que digamos, pero eso no demerita que la oriunda de Manchester se vio viva y aprovechó la menor oportunidad para recuperar su libertad. A pesar de la distancia, el padre inmediatamente llamó a las autoridades de la tierra de los canguros y éstas lograron interceptar al vehículo.
Entrevistada por The Daily Mail, Mary comentó que no se subió al auto del sujeto nomás porque sí: llevaba dos semanas conociéndolo y sintió que podía confiar en él sin ningún problema. Sin embargo, una vez en el vehículo se le botó y de qué manera: “Perdió la razón (…) hablaba de alienígenas y teorías de conspiración, me decía que él era especial y que yo era como él. Parecía loco y no sabía de qué era capaz”.
