Lo que necesitas saber:
Octubre es un mes asombroso para conocer el lado tenebroso y genial de la Ciudad de México, sobre todo si se trata de museos poco conocidos.
Una de las mejores cosas de vivir en la CDMX es la gran cantidad de museos que tiene. Entre las 16 alcaldías que componen la ciudad, podemos encontrar toda clase de recintos, algunos únicos como el del Estanquillo, otros de arte moderno como el MUAC y unos tantos que resultan un tanto tenebrosos.
Hablamos de una multitud de recintos poco conocidos, que resultan terroríficos, ya sea por los sitios en los que están ubicados, por sus temáticas o por las piezas que se exponen en sus muros. Lugares que son perfectos para los entusiastas de los sustos inofensivos.
De los más de 182 museos que hay en la capital, esta aterradora selección ofrece también la oportunidad de recorrer espacios inadvertidos. Aprender a conocer, desde un sitio distinto, los lugares que siempre vemos y convertirnos en turistas de nuestra propia ciudad.
Con esto en mente, y porque octubre merece viajes macabros, aquí les dejamos una breve lista de museos tenebrosos de la CDMX, tan lúgubres como geniales, que despertarán nuestro interés.
Museo del Carmen
Existen pocas cosas tan temibles como los antiguos retiros religiosos. Además de exponer cientos de piezas que datan del año 1500, en este espacio podemos aprender sobre la silenciosa vida que tenían los Carmelitas Descalzos.
Podemos visitar sus cuartos y la forma acética en la que pasaban su existencia. Por si lo anterior fuera poco, hay oportunidad de bajar al subsuelo y ver la extraña colección de cuerpos momificados que se encontraron luego de realizar ciertas excavaciones.
Dirección: Av. Revolución 6-no 4 y, San Ángel, Álvaro Obregón, 01000 Ciudad de México, CDMX
Museo de Cera
Ubicada en el corazón de la Juárez, esta casona fue obra de Rivas Mercado, el famoso arquitecto que diseñó el Ángel de la independencia. Aunque la residencia se hizo a principio del siglo XX, el museo abrió sus puertas en 1979.
Además de tener una multitud de rincones oscuros, el Museo de Cera preserva una de las mayores colecciones de estatuas de la Ciudad de México. Asimismo, cuenta con una sala de terror donde se exhiben creaturas tenebrosas que tienen sonidos y movimiento.
Dirección: Londres 6, Juárez, Cuauhtémoc, 06600 Ciudad de México, CDMX
Museo de la Medicina Mexicana
También conocido como el Antiguo Palacio de la Inquisición, este edificio del Centro Histórico sirvió como la trágica sede para realizar las torturas y juicios que mandaba a hacer la Santa Inquisición de la Nueva España. En sus habitaciones murieron una buena cantidad de personas, casi todas inocentes.
En la actualidad, el espacio alberga una serie de exposiciones permanentes que sirven, tanto para conocer la historia de la medicina en México, como para recordar los agravios cometidos con los respectivos instrumentos usados durante la colonia.
Dirección: República de Brasil 33, Centro Histórico CDMX
Museo-Panteón de San Fernando
Aunque suene raro, en la Ciudad de México tenemos un museo que en el siglo XIX era una especie de panteón donde se enterraban a figuras célebres. Un sitio donde descansan lo restos de Benito Juárez, Ignacio Zaragoza y Miguel Miramón.
Este recinto sepulcral se construyó en 1832 sobre las tumbas anónimas de los frailes fernandinos. En un inicio era un panteón privado, pero tras una gran epidemia de cólera, se tuvo que abrir a todo el público. Su aspecto y su historia lo hacen otro museo tenebroso de la CDMX.
Dirección: San Fernando 17, Centro Histórico, CDMX
Museo de Patología
Existen pocos lugares en el mundo como este. Y es que el Museo de Patología del Hospital General Eduardo Liceaga exhibe en sus vitrales al menos mil piezas diferentes de órganos. Lo podemos considerar como otro museo tenebroso de la CDMX.
Desde fetos en diferentes momentos de gestación hasta cerebros dañados por cisticercos, este espacio es perfecto para el estudio y sí, es por demás macabro para los que no estudian medicina, es decir para las personas que no están acostumbradas a ver la anatomía de una forma tan directa.
Dirección: Dr. Balmis No. 148, Col. Doctores, Cuauhtémoc