Sabemos que es muy cliché decir ‘eso parece sacado de la ciencia ficción’ pero en este caso es completamente inevitable hacer tal afirmación.
La cosa es que la firma legal estadounidense Baker & Hostetler acaba de contratar a un nuevo abogado llamado Ross. Pero este no es cualquier abogado, es un sistema de inteligencia artificial desarrollado por IBM con base en su popular plataforma de IA, Watson.
Ross está programado para reconocer el lenguaje natural y responder en los mismos términos. El sistema formula posibles hipótesis que puedan responder a una pregunta concreta y las documenta analizando todo el cuerpo de legislación existente sobre el tema.
En ese sentido es diferente a un buscador convencional ya que no ofrece posibles respuestas, sino la respuesta estructurada que él considera más acertada según los textos legales existentes.
Además de eso, como investigador legal, Ross rastrea en tiempo real los resultados de nuevas sentencias y juicios de jurisprudencia y los incorpora a su documentación legal para futura referencia. Si los nuevos datos afectan a un caso en proceso, esta inteligencia artificial avisa a los abogados de la firma para que modifiquen su estrategia en consonancia.
Como otras IAs, Ross aprende de las interacciones que tiene con humanos y cuanto más se le habla, mejor y más rápido entiende el lenguaje natural. Baker & Hostetler lleva más de un año trabajando con IBM en el desarrollo de Ross.
Sin embargo, la gente de esta firma legal mencionó que no son los únicos que contrataron los servicios de un abogado artificial y otras firmas ya lo están haciendo también.
Ross trabajará en el departamento de gestión de quiebras de Baker & Hostetler, al lado de 50 abogados humanos. De verdad suena a la premisa de una película o una serie de televisión y será interesante ver que tan eficiente es en la práctica.
