Hola y bienvenidos una vez más a esta su sección encargada de contar las historias de los personajes de los videojuegos.

Esta vez, el juego que nos da cita no es uno de antaño o de peleas como a los que estamos acostumbrados. Es más, es de un género del cual no soy exactamente tan fan.

Sin embargo, al igual que miles de gamers, Overwatch me ganó por completo.

Desde que Blizzard anunció una nueva licencia, todos nos encontrábamos expectantes de lo que podríamos esperar. Y con una campaña de videos en donde se nos presentaban a sus coloridos personajes, Overwatch se llevó el cariño del público mucho antes de que siquiera se anunciara su fecha de lanzamiento.

¿Y de qué va el juego?

Overwatch

En un mundo donde los humanos y las máquinas conviven; una terrible crisis provocó una guerra entre los habitantes del mundo. Conocidos como Omnics, –máquinas con Inteligencia Artificial– una terrible guerra inició.

Para contrarrestar esta crisis, los gobiernos del mundo formaron una organización internacional llamada, Overwatch, la cual estaba conformada por los mejores héroes del mundo (Jack Morrison, Gabriel Reyes, Ana Amari, Liao, Reinhardt, Wilhelm y Torbjörn Lindholm).

Treinta años después, los miembros de Overwatch ganaron la guerra, destruyendo a la mayoría de los Omnics –excepto por uno, pero esa es una historia para otro día. Esto les confirió fama internacional, ganando una cantidad inmensa de recursos y seguidores. Haciendo de la estabilidad global su misión, Overwatch prosperó por varios años.

Sin embargo, la opinión pública de la organización fue decayendo gracias a varias violaciones. De un momento a otro, los alguna vez llamados héroes, fueron catalogados como criminales de guerra, forzando a varios de sus miembros a retirarse en vergüenza.

Así mismo, una organización fundada por el exmiembro de la organización, Gabriel Reyes, Blackwatch; se dio a la tarea de contrarrestar a Overwatch.

Y para colmo, las tensiones entre los nuevos Omnics y los humanos aumentaban…

En una junta especial, el comité de las Naciones Unidas estaba preparado para desmantelar a Overwatch, pero un ataque en la base de la organización localizada en Suiza detuvo este proceso, ya que Jakc Morrison, Comandante de la organización y Gabriel Reyes; habían perecido en el ataque.

Aún así, las Naciones Unidas desmantelaron a Overwatch, catalogando sus actividades como ilegales. Sin sus guardianes, el mundo comenzó a decaer nuevamente en conflicto, con los Omnics y los humanos al borde de la guerra.

Lamentablemente, esta situación escaló aún más después de la muerte de Tekhartha Mondatta, líder espiritual de los Omnics.

Pero, a pesar de que habían sido desmantelados, los miembros de Overwatch seguían protegiendo al inocente y se lanzarían en una cruzada para encontrar a los responsables del caos en el mundo.

Con esta pequeña introducción, es tiempo de que hablemos de uno de los personajes de Overwatch. Y que mejor manera de empezar, que hablando de la historia de su personaje estrella.

Es tiempo de que nos adentremos a la vida de la saltadora en el tiempo y waifu de muchos gamers, Tracer.

Una “Mate” con mucha personalidad

Nacida en Lóndres, la vivaz y un poco varonil, Lena Oxton, siempre tuvo una fascinación con volar. Esto la llevó a convertirse en una de las pilotos más jóvenes del mundo; superando prácticamente todos los récords de sus predecesores.

Sus habilidades, sorprendieron enormemente a la organización Overwatch, quienes la reclutaron en sus filas, convirtiéndola en la persona más joven en entrar a la organización.

Viendo su temeraria forma de volar, fue elegida como el piloto prueba de la nave Slipstream, la cual tenía la capacidad de dar saltos en el tiempo.

Pero como suele ocurrir, esta combancha volante falló en el primer intento, desapareciendo del mundo junto con Lena.

Meses después, Lena reapareció por unos momentos, desapareciendo pocos segundos después. Debido al accidente, sus moléculas habían sido desincronizadas del flujo del tiempo (videojuegos, ¿verdad?).

Sufriendo de un mal llamado, “diasociación cronal”, Lena aparecía y desaparecía por horas y en ciertos casos, días.

Todos los científicos tiraron la toalla, excepto por Winston, gorila genéticamente modificado (a poco no aman este tipo de cosas) que de entre varias cosas, era un genio.

Al analizar la situación, Winston fue capaz de crear un acelerador cronal, con el cual podía anclar a Lena en esta dimensión. Además de regresarle su vida “normal”, este dispositivo le dio la habilidad de controlar su propio tiempo, permitiéndole acelerar o retroceder por unos segundos en el tiempo.

Esto la convirtió en uno de los mejores agentes de Overwatch, en donde le dieron su nombre clave; Tracer.

Tiempo después, Tracer fue mandada a vigilar el discurso de Tekhartha Mondatta, temiendo que este pudiera ser el objetivo de Darkwatch:

Hasta aquí, dejaremos la historia de Tracer, ya que de momento no se han dado más detalles sobre lo que ocurrió después del asesinato de Tekhartha Mondatta.

Acompáñennos las próxima vez, cuando revisemos la historia de uno de los personajes más importantes para la historia de Overwatch

Hasta la próxima.

Texto: Luis Alberto Valis/ValisTheDarkia6

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