Cayendo como fichas de dominó, decenas de eventos masivos se han estado cancelando uno tras otro por el brote de coronavirus. Su más reciente víctima: la Electronic Entertainment Expo. Mejor conocida por su abreviatura, la E3 es es la convención de videojuegos más importante de la industria. Aquí, diversas compañías hablan de sus próximos lanzamientos y de su software y hardware. Tristemente, amanecimos con la noticia que oficializa su cancelación.
En un mensaje emitido, la ESA citó “crecientes preocupaciones sobre el virus COVID-19” al cancelar oficialmente la Electronic Entertainment Expo de este año. “Luego de cuidadosas consultas con nuestros compañeros acerca de la salud y seguridad de todos en nuestra industria -nuestros fans, empleados, expositores y nuestros socios del E3- hemos llegado a la difícil decisión de cancelar el E3 2020 que estaba programado del 9 al 11 de junio en Los Angeles”, publicaron en su página oficial.
E3 2020 has been cancelled. My heart has been on such a roller coaster the past month. To those of us who love games, we will find new and different ways to come together as a community. Please stay safe. pic.twitter.com/DlNW7SY5Bq
— Geoff Keighley (@geoffkeighley) March 11, 2020
Con esta triste noticia, llega una que puede alentar un poco a todos los amantes de los videojuegos. La organización dice que está “explorando opciones con nuestros miembros para coordinar una experiencia en línea para mostrar anuncios y noticias de la industria en junio de 2020”, pero no se ha anunciado nada concreto sobre esto. Entre muchas compañías, Warner Bros. Games planeaba hacer una conferencia de prensa en la E3 de este año por primera vez para hablar sobre el juego de Batman, Harry Potter y Rocksteady, entre otros.
El E3 pasa a la larga lista de los eventos que se han cancelado por el coronavirus. Sin duda el 2020 ha sido un año duro para los organizadores de eventos, conferencias, conciertos, festivales y torneos. Pero el problema que nos afecta se ha vuelto lo suficientemente preocupante para catalogarse como emergencia de salud pública y que los eventos masivos sean catalogados como una irresponsabilidad.