Hola y bienvenidos una vez más a esta su sección dedicada a contar las historias de los personajes del mundo de los videojuegos.
Hoy continuaremos lo que empezamos la semana pasada. A pesar de tener tres juegos en su haber, casi todos conocimos a Metal Gear con su título salido en la primera consola de Sony, el PlayStation.
A partir de aquí fue que la carrera de Hideo Kojima tomó vuelo y bueno… lo demás es historia.
Debido a que nos espera (bueno, me espera) una larga historia llena de revoltijos argumentales… sin más preámbulos:
Shadow Moses
Después de acabar con Big Boss una segunda vez, David volvió a su retiro, descansando de las pesadillas que lo atormentaron por años.
Sin embargo, la calma viene antes de la tormenta y un fantasma de su pasado se encontraba listo para entrar en acción.
La iniciativa Les Enfants Terribles, dio nacimiento a dos sujetos diferentes: Solid Snake (David) con los genes recesivos de Big Boss y Liquid Snake (Eli) con los genes dominantes –así como a un tercer clon idéntico al Mejor Guerrero del Siglo XX.
Por alguna razón, los científicos que lo crearon le hicieron creer a Liquid que él tenía los genes recesivos de Big Boss, lo que lo llevó a sufrir de un complejo de inferioridad ante su hermano.
Esto lo convirtió en presa fácil de las maquinaciones de Revolver Ocelot, miembro original de FOXHOUND y de Diamond Dogs, quien durante años fuera la mano derecha de Big Boss.
Buscando desestabilizar al gobierno de los Estados Unidos (en secreto, Ocelot busca terminar con los Patriots, pero eso lo veremos después), ambos hombres tomaron control de la isla Shadow Moses en Alaska, la cual tenía en su poder el prototipo de una nueva Metal Gear.
Amenazando con lanzar un ataque nuclear a menos que se les entregaran los restos de Big Boss y mil millones de dólares, Liquid y Ocelot reunieron a varias de los miembros de FOXHOUND, a las Fuerzas Especiales de Nueva Generación y a los Hijos de Big Boss (iniciativa creada a partir de Les Enfants Terribles).
Sin más remedio y con muy pocas opciones, el Comandante Roy Campbell contactó a Solid Snake para una nueva misión de infiltración. Viéndose renuente a participar, tuvo que acceder, ya que el gobierno y la milicia estadounidense lo acusaban de comportamientos inapropiados en sus últimas dos misiones, mismos que podían llevarlo a la cárcel.
Aún con el pesar de haber matado a su propio padre, Snake se preparó para acabar con las ambiciones de Liquid, además de rescatar al presidente de ArmsTech (desarrolladores del Metal Gear REX), Kenneth Baker y al Coronel Donald Anderson de la DARPA.
Con menos de 24 horas antes del ataque, a Snake le fueron suministrados nanomachines (ya hablaré de eso después), los cuales lo mantendrían nutrido durante todo el proceso de su misión.
Infiltración
A 19 horas del ataque nuclear, Snake logró infiltrarse en la base Shadow Moses. Bajo las órdenes del Comandante Campbell, quien también lo había buscado para salvar a su sobrina, Meryl Silverburgh.
Entrando de manera submarina, Snake comenzó con su inserción en Shadow Moses encargándose de los miembros de las Fuerzas Especiales de Nueva Generación, aunque su método principal se basó en el completo sigilo.
Poco tiempo desde su entrada Snake vería a Liquid tomar la nave Hind D, lo que lo llevó a deducir el uso de armas provenientes de Rusia. Al avanzar hacia el hangar donde se encontraban los tanques, sería contactado por Kazuhira Miller, quien le brindaría apoyo vía radio.
Después de encontrar a Donald Anderson, éste le confirmó que Liquid sí tenía la capacidad de lanzar un ataque nuclear gracias a la existencia del Metal Gear REX –detalle que no le había sido informado a Snake.
Para activar a la terrible máquina, se necesitan dos códigos especiales: uno que Anderson les tuvo que dar y otro de Kenneth Baker. Sin embargo, hay un dispositivo que puede anular cualquier orden dada a REX (el sistema PAL), incluso después de la activación del arma.
Para poder acceder a éste, Snake debía de juntar tres cartas especiales. Prometiendo regresar por Anderson después de juntar el dispositivo, éste sufrió de un ataque cardiaco, muriendo al instante.
Al seguir su camino, se encontró con Meryl quien estaba disfrazada como uno de los Soldados Genoma. Esto causó una pequeña escaramuza entre ambos.
Sin embargo, ella fue detenida al verse rodeados de Soldados Genoma. Entre ambos lograron acabar con la amenaza, pero Meryl comenzó a dispararle.
Esto se debía a que había sido controlada mentalmente por uno de los miembros de Los Hijos de Big Boss, Psycho Mantis.
Liberando a Meryl del control de Psycho Mantis, ambos se dirigieron a la locación de Anderson, en donde vieron que estaba amarrado a un pilar de explosivos C4. Temiendo lo peor, Snake iría en ayuda del hombre, pero sería detenido por Revolver Ocelot.
Después de una pequeña charla y un duelo, ambos pistoleros detendrían su ataque ante la llegada de Cyborg Ninja, quien cortó la mano de Ocelot.
Salvando a Baker, le diría que Meryl tenía las llaves PAL. Anderson le dijo también que buscara a Hal Emmerich (Otacon), doctor que lo ayudó en la creación del Metal Gear REX, proyecto creado por el gobierno de los Estados Unidos.
Después de recibir la información de Anderson, éste moriría de un ataque al corazón. Snake iría en búsqueda de Emmerich y Meryl. En su camino se vería confrontado por Vulcan Raven:
Tras destruir varios tanques, Snake logró burlar al peligroso hombre, quien reportó a Liquid lo ocurrido.
Al llegar a donde tenían encerrado a Otacon, Snake se volvería a encontrar con el Ninja, enfrentándolo en un duelo:
Gracias a este combate Snake dedujo la identidad del Ninja como Gray Fox, a quien creía muerto después de lo ocurrido en Zanzibar.
Con Otacon asegurado, Snake siguió avanzando reencontrándose con Meryl. Sin embargo, ella volvería a ser controlada por Psycho Mantis.
Después de una extraña batalla (en serio), Psycho Mantis le contaría su pasado y su relación con Liquid (Phantom Pain). A pesar de ayudarlo, no estaba de acuerdo con las ambiciones del clon de Big Boss, accediendo a ayudarlo por el puro placer de matar gente.
Creyéndose a salvo, su camino se vería interrumpido cuando la francotiradora, Sniper Wolf le disparó a Meryl, tomándola como rehén. Sin más opción, Snake sería capturado y torturado.
Resistiendo la tortura, lograría escapar gracias a la ayuda de Otacon. Echándose un tiro contra Liquid logró escapar de su prisión, enfrentando una vez más a Sniper Wolf:
Al seguir avanzando llegaría a la sala de control de REX, en donde volvería a enfrentarse con Vulcan Raven:
Después de vencerlo, éste le diría que desde un principio se encontraba haciendo el trabajo sucio de FOXHOUND –ya que el sistema PAL servía para activar al Metal Gear y que tanto Anderson como Baker eran miembros de Los Hijos de Big Boss, Decoy Octopus.
Tras una conversación muy álgida entre Snake, Campbell y Miller, Otacon le informaría que el Metal Gear REX estaba preparado para hacer el lanzamiento.
Después de perder una de las llaves PAL, Snake la encontraría en el drenaje donde se vio envenenado por la radiación. Siendo rescatado por Naomi, quien le diría que en efecto era una espía.
Revelándole que ella era la hermana de Gray Fox. En un inicio, buscaba tomar venganza contra Snake por la muerte de su hermano, pero tras conocer la verdad de sus operaciones, le confesó que lo había inyectado con un virus llamado FOXDIE, el cual causaba ataques al corazón y se encontraba en todos los miembros de Los Hijos de Big Boss y las Fuerzas Especiales de Nueva Generación.
Con esto Snake entendió la verdad detrás de la exigencia por recuperar el cuerpo de Big Boss, ya que esperaban que con sus restos pudieran curar el virus.
Reingresando a la sala de control del Metal Gear REX, Snake utilizaría el Sistema PAL, activando el arma. Confundido, sería contactado con Miller, quien le revelaría el plan de FOXHOUND.
Antes de continuar, Campbell interfería con la plática, diciéndole a Snake que no estaba hablando con Miller, ya que este había muerto tres días antes.
Tras esto, Liquid se revelaría como el falso Miller. Así mismo, le revelaría su origen como clones de Big Boss. Enfurecido por ser el receptor de los genes recesivos, su odio hacia su padre y hermano lo llevó a la locura.
Subiéndose al REX, la pelea entre ambas serpientes daría inicio:
Viéndose abrumado por la máquina, Gray Fox llegaría para ayudarlo. Logrando destruir el cristal de la cabina del piloto, el ninja sería aplastado por REX.
Sin embargo esto le dio la oportunidad de atacar a Liquid y destruir al Metal Gear.
Despertando tras la explosión, Snake se vería confrontado por Liquid, quien había secuestrado a Meryl (malaya). Además de la revelación del proyecto “Les Enfants Terribles”, un desquiciado Liquid le explicaría que con la destrucción del REX, el Pentágono mandaría un ataque nuclear para destruir a Shadow Moses.
Antes de poder tomar a Meryl y Otacon para escapar, Snake se vio forzado a matar a Liquid en una batalla a puño limpio:
A pesar de sus esfuerzos por detener el ataque, Campbell sería removido de su puesto por órdenes del Secretario de Defensa Jim Houseman, quien quería eliminar a Snake, a quien consideraba como un fracaso.
Tomando un Jeep para escapar, Meryl y Snake tuvieron que dejar a Otacon, quien decidió quedarse en la base para ayudarlos. En su camino tuvieron que destruir a las fuerzas restantes de Shadow Moses, así como enfrentarse una vez más a Liquid.
Con el Jeep destruido y Liquid muriendo de un infarto por el virus FOXDIE, Snake vería que los aviones encargados de destruir a Shadow Moses no se encontraban por ninguna parte.
Campbell había logrado contactarse con el presidente, quien mandó encarcelar a Houseman por sus actos de traición.
Sin embargo esto era sólo el inicio de una larga conspiración. Ocelot quien había sobrevivido, hablaría con el Presidente de los Estados Unidos, reportando que el clon con los genes dominantes de Big Boss había sido asesinado por el clon con los genes recesivos.
¿Pero cómo es que el presidente está involucrado en todo esto? Simple, él era el tercer clon de Big Boss, Solidus…
Y hasta aquí dejaremos la historia de Solid Snake.
Dispénsenme si dejé algunos detalles fuera pero, como sabrán, a Hideo Kojima le encanta hacerla de emoción con todas sus historias.
Cuando acabe de contar la historia de Solid Snake (y lleguemos a Metal Gear Solid 4), retomaré algunos de los detalles dejados en las siguientes notas, ya que no falta un largo camino por recorrer…
Hasta la próxima.
