Cuando piensan en Excel, esa infame herramienta de cálculo que muchos odiamos, lo último que se les viene a la cabeza es el concepto de “colorido arte”; sin embargo,para el artista japonés Tatsuo Horiuchi, este programa de Microsoft Office es más una especie de pincel para sus obras que una herramienta para contabilizar y ordenar números e información.
Cuando uno le pregunta al señor Horiuchi el porque de su predilección por un programa que jamás fue diseñado para crear semejantes obras de arte, el amable artista de 73 años replica que lo programas de diseño son demasiado complicados de usar, por lo que un día optó por cambiar los aburridos gráficos de Godínez por el pincel virtual de Excel.
La obra de Horiuchi-San cuenta con tanta calidad artística que sus creaciones han sido expuestas con un gran éxito a lo largo y ancho de Japón y otros países.
La obra es reminiscente al arte tradicional japonés Ukiyo-e cuyo principal protagonista es la naturaleza durante un afán contemplativo, típico de algunas culturas orientales como la china y la coreana.
Lo que es la paciencia, la creatividad y la iniciativa.