Hola y bienvenidos una vez más a esta su sección dedicada a contar las historias detrás de los personajes de los videojuegos.

El día de hoy, nos alejamos un poco de la escena de los títulos de pelea y nos embarcaremos en la historia de uno de los personajes femeninos más importantes de los Survival Horror.

Así que, carguen con una buena dotación de munición y de hierbas verdes, que hoy hablaremos de la sobreviviente por excelencia: Jill Valentine

El camino a una estrella

Demostrando desde joven una gran capacidad para el combate físico y armado, Jill Valentine formó parte de uno de los grupos élite del Ejército de los EE. UU., el Equipo Delta, en donde ganó reconocimiento en el manejo de dispositivos explosivos.

Estas acreditaciones, le ganaron un puesto en uno de los mejores equipos tácticos en el mundo, S.T.A.R.S.

Su experiencia en el Equipo Delta, le valió un buen lugar dentro del Equipo Alpha de los S.T.A.R.S. juntó a Chris Redfiled, Barry Burton y Albert Wesker.

Sería el 23 de julio de 1998, el día que un fatídico incidente la llevaría a enfrascarse en una batalla con la Corporación Umbrella, la cual llevaba años haciendo investigaciones para crear armas biológicas (B.O.W.).

Después de recibir una llamada de auxilió del Equipo Bravo quienes habían asistido a las montañas Arklay, tras de varias llamadas acerca de casos de desapariciones y de actos de canibalismo, estos desaparecieron.

Resident Evil

Jill y su equipo conformado por Chris Redfield, Barry Burton, Joseph Frost y Albert Wesker, se aprestaron al sitio para investigar la desaparición del Equipo Bravo. Al llegar, serían atacados por unos perros infectados, quienes mataron a Joseph Frost, además de ser abandonados por su piloto, Brad Vickers.

Sabemos que el intro de la versión Remastered es mejor, pero vamos, esto es tan cursi que es perfecto.

No viendo otra salida, se resguardaron en la Mansión Spencer. Esto separaría al equipo, dejando a Jill y Barry solos, mientras que Chris y Wesker permanecieron juntos en otra sección de la mansión. Yendo a investigar un poco, Jill se encontraría con un sujeto infectado, quien estaba acabando de merendarse los restos de un miembro del Equipo Delta.

A partir de aquí, Jill encontraría que la mansión tan solo era la cubierta de un laboratorio subterráneo, perteneciente a Umbrella. Aquí, Jill debería de confrontar a varios B.O.W. (Bio Organic Weapon), seres creados a partir de una extraña cepa de virus, nombrada como Virus-T, la cual formaba una mutación extrema en los sujetos de prueba, convirtiéndolos en algo así como un Zombi.

Mientras investigaba más afondo los actos nefastos de Umbrella, Jill empezaría a sospechar de Barry, quien aparentaba saber algo acerca de todo el asunto. Después de una breve confrontación con su compañero, Jill lo desarmaría, pero se vería forzada a regresarle su arma al verse atacados por una grotesca criatura.

Tiempo después descubrirían que la criatura alguna vez había sido humana. Lisa Trevor que nació en 1953 y se convirtió en el primer sujeto de prueba del Virus Progenitor. Sobreviviendo y ganando la habilidad de regenerarse, Lisa fue víctima de horribles experimentos, pero debido a su condición no podía morir. A través de ella, fue que el Virus-T y G, fueron creados.

Después de esto, Jill, aún con dudas sobre Barry, se adentraría aun más en el laboratorio, donde se reuniría con Chris y con Rebecca Chambers, única sobreviviente del Equipo Bravo.

Junto con Chris, Jill se enteraría de que Wesker se encontraba trabajando para Umbrella y que durante todo este tiempo, había chantajeado a Barry para que lo ayudara a recuperar el Virus-G.

Viéndose acorralado, Wesker liberaría al más poderoso B.O.W. que había en la mansión, el Tyrant:

Sin embargo, la criatura lo atacaría y embestiría a Jill y Chris. Ambos lograrían derribar a la bestia, al mismo tiempo que la secuencia de autodestrucción se activó, dejándolos con pocos minutos para escapar. Todos llegarían al techo de la mansión, donde utilizarían una bengala para llamar a Brad.

El Tyrant remergería e iniciaría su ataque una vez más. Jill y Chris lo volverían a incapacitar y subirían al helicóptero pocos segundos antes de que la mansión explotara, destruyendo toda evidencia y rastro del trabajo de Umbrella.

Al regresar a Raccoon City, los sobrevivientes del incidente de la Mansión Arklay, levantaron una denuncia en contra de Umbrella, pero esta les fue negada por Brian Irons, Jefe del Departamento de Policía de la ciudad. Viéndose ignorados por el gobierno de los EE. UU., Jill, Chris, Rebecca y Barry decidieron tomar al toro por los cuernos y cada uno, se enfocó en investigar a la corporación.

Chris viajaría a Europa a finales de Agosto, mientras que Barry recolocaría a su familia en Canadá. Jill se quedaría en Raccoon City para seguir investigando a Umbrella para después, reunirse con sus compañeros en Europa.

Sin embargo, dos meses después de lo sucedido en la Mansión, una infección del Virus-T abrumó a la ciudad. En la noche del 27 de septiembre, Jill abandonaría su departamento en vista de la invasión de los B.O.W.

Resident Evil 3

Jill encontraría refugio en un almacén en donde conocería al novelista Dario Rosso, quien había perdido a su hija debido a los zombis. Al ver que no encontraría ayuda en ese lugar, se aventuraría a las calles de la ciudad, donde se encontraría con Brad Vickers, quien había caído en una gran depresión tras lo ocurrido en la mansión.

Brad quien había sido infectado, le advertiría de una monstruosa criatura que andaba buscando a los miembros restantes de los S.T.A.R.S., asesinándolos uno por uno. Jill llegaría a la estación de policía donde atestiguaría la muerte de Brad a manos de la criatura antes mencionada.

Ante ella, se encontraba Nemesis, un Tyrant infectado con parásito NE-a, con el cual Umbrella pretendía crear a un Tyrant que pudiera retener cierta inteligencia y la habilidad de seguir órdenes.

Jill lograría escapar de Nemesis, adentrándose en el Departamento de Policía de Raccoon City. Jill navegaría por el ala oeste del edificio, donde encontraría al oficial Marvin Branagh quien se encontraba gravemente herido por una mordida en el pecho.

Jill recorrería varias partes de la estación, haciéndose de la llave del ayuntamiento de la ciudad y la llave de la oficina de los S.T.A.R.S. Utilizando la llave para entrar en la oficina del segundo piso, recibiría un mensaje por radio de un hombre llamado Carlos Oliveira.

Preparada para irse, se vería atacada nuevamente por el implacable Nemesis quien la persiguió por la estación. Jill lograría incapacitarlo, regresando a la oficina donde se encontraba el cuerpo de Marvin, pero este había desaparecido.

Jill abandonaría la estación e iría en búsqueda de Carlos. Llegando a los barrios bajos de la ciudad, Jill encontraría los cuerpos de un grupo de mercenarios. Ahí encontraría a Carlos, quien era el único sobreviviente del Servicio de Contramedidas de Armas Biológicas de Umbrella.

Después de explicarle la situación, ambos se separarían. Jill llegaría al Ayuntamiento el cual se encontraba plagado de zombis. Ahí se reencontraría con Carlos, junto a Nikolai Zinoviev y Mikahil Victor.

Nikolai tendría un plan de escape, el cual necesitaba el uso de un teleférico que los llevaría al helicóptero de escape. Pero no confiaba en Jill, pero viendo que no tenía más opción, le pediría ayuda para encontrar las partes necesarias para hacer funcionar el teleférico.

Jill recolectaría las partes necesarias, regresando al almacén donde el cuerpo de Dario yacía muerto por el ataque de los zombis. Además de ir las oficinas de Umbrella para recolectar la fuente de poder, donde sería atacada una vez más por Nemesis.

Jill lograría regresar con las partes y repararía el teleférico. Con esto, el grupo se dispuso a partir, pero nuevamente Nemesis fue capaz de encontrarla. Mikahil sacrificaría su vida para proteger a Jill y a Carlos, haciéndose explotar junto con Nemesis, provocando el colapso del teleférico.

Jill y Carlos caerían cerca de la Torre de Reloj St. Michael, donde tomaron refugio. Sin embargo, Nemesis los encontraría y continuaría con su persecución. Jill repararía la alarma de la torre para atraer al helicóptero que se acercaba.

Desafortunadamente, Nemesis destruiría el helicóptero con un lanza misiles. Harta de seguir escapando, Jill confrontaría al temible monstruo afuera de la torre de reloj.

Jill sería infectada con el Virus-T después de derrotar a Nemesis. Carlos la llevaría a la torre del reloj, donde ella caería en un estado de semicoma. Pasarían 3 días y el primero de Octubre, Jill despertaría.

Después de explicarle que se encontraba infectada, Carlos se obligaría a encontrar la cura antes de que se transformara en un zombi. Yendo al Hospital General de Raccoon, encontraría la vacuna, curando así del Virus-T a Jill.

Después de esto, Carlos le advertiría que Nikolai seguía con vida y que no podía confiar en él. Con esto, Jill continuaría buscando la forma de escapar, sin saber que el Virus-T en su cuerpo no se había curado sino más bien, permanecía en un estado de hibernación.

Jill encontraría una da las plantas de destrucción de material peligroso de Umbrella en donde pelearía con Nikolai y con Nemesis. Después de vencerlos, recibiría un mensaje de Carlos quien le diría que Umbrella había mandado un misil con la intención de destruir Raccoon City y toda evidencia del incidente.

Antes de poder reaccionar, Jill se vería confrontada por Nemesis, que había mutado después de absorber a un Tyrant que se encontraba en el laboratorio. Utilizando un arma especial traída unos días antes del incidente, Jill lograría acabar con Nemesis de una vez por todas.

A pesar de esto, Jill y Carlos no encontrarían una forma de escapar, afortunadamente, Barry llegaría al sitio y los rescataría a tiempo antes de que el misil estallara.

Jill presenciaría la destrucción de Raccoon City, la cual fue ordenada por el mismo gobierno de los EE. UU. Viendo que nadie los podría ayudar, Jill junto a sus camaradas, se unieron a varios grupos que se dedicaban a combatir a Umbrella.

Resident Evil Umbrella Chronicles

Enfocando su vida a la caída de Umbrella, Jill se uniría a una agencia Anti-Bioterrorista. En el año 2003, ella y Chris recibirían informes de ataques de lobos en Rusia. Al llegar, encontrarían a la aldea destruida y plagada de zombis.

Buscando sobrevivientes, encontrarían a una pequeña niña llamada Anna quien les explicaría que después de ser mordidos por los lobos, los miembros de su aldea se transformaron y empezarían a atacar a todos.

Después de enterarse que todos los adultos se encontraban refugiados en el silo, Chris y Jill fueron a buscar más sobrevivientes. Pero en su lugar encontraron el cuerpo sin vida del jefe de la ladea, quien se había congelado al meterse a un refrigerador para esconderse.

Al poco tiempo se verían rodeados por zombis, al encontrar la salida bloqueada Chris dispararía a las bolsas de harina y disparándole a un foco, crearía una explosión de polvo, a la cual sobrevivieron al esconderse en el refrigerador.

Después de que la nube de polvo se disipara y salieran del silo, se encontrarían con un rostro familiar. Wesker los felicitaría por haber sobrevivido y les informaría que el no era el culpable de este ataque, pero antes de que pudieran reaccionar, el suelo enfrente del silo colapsaría, liberando a dos Hunters 5.

Wesker tomaría esta oportunidad y escaparía, mientras que Jill y Chris se encargaban de los B.O.W. Después de lidiar con la situación, alcanzarían a Wesker quien había entrado en una de las cabañas donde se encontraba una caja fuerte.

Anna le diría que esa era su casa y Wesker les revelaría que toda la aldea trabajaba para Umbrella. Tomando el collar de la niña que servía como llave, Wesker abriría la caja fuerte; antes de que la pudiera abrir, Anna les diría a Chris y a Jill que escaparan, ya que la caja estaba conectada a unos explosivos, como precaución por si Wesker llegaba a aparecer.

Después de esto, se enterarían que el padre de Anna trabajaba en una planta de químicos que era propiedad de Umbrella, la cual servía como una unidad de contención para un nuevo tipo de B.O.W.

Ambos se dispondrían a destruir las instalaciones y al avanzar, se vieron enfrentados por el T-A.L.O.S., un Tyrant modificado con una armadura cibernética y creado por el Coronel Sergei Vladimir, quien se revelaría junto a su creación.

Sergei los encerraría junto al T-A.L.O.S., el cual no sería pieza para el equipo. Poniendo fin a la última instalación de Umbrella, Chris y Jill no celebrarían, ya que Wesker seguía con vida y después de haberse inyectado el Virus-G, se había hecho más poderoso que nunca.

Sin embrago, no había tiempo para lamentarse y junto a otras nueve personas, fundarían la Alianza de Evaluación de Seguridad Bioterrorista (B.S.A.A.).

Tan solo un año después, la ciudad de Terragrigia sería destruida por el satélite espacial Regia Solis bajo las órdenes de la Comisión Federal de Bioterrorismo (FBC), bajo ataque masivo de armas biológicas, mandadas por la organización conocida como Veltro.

Un año después en 2005, Jill y su nuevo compañero Parker Lucianni serían mandados a investigar unos cuerpos extraños que aparecieron en las costas cerca de las ruinas de Terragrigia, bajo las ordenes de Clive R. O’Brian, Director de la B.S.S.A.

Al completar su misión, se les informaría que Chris Redfield y Jessica Sherawat estaban desaparecidos. Su última locación registrada fue en un barco en algún punto del mar Mediterráneo.

Jill y Parker encontrarían la locación del último registro de Chris, un crucero masivo llamado el Queen Zenobia

Y hasta aquí dejaremos por hoy la historia de Jill. En el próximo artículo, contaremos lo sucedido en el Queen Zenobia, además del secuestro de Jill y su participación en los eventos de Resident Evil 5.

Hasta la próxima.

 

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