Una vez más, el rubro científico ha demostrado los límites de su grandeza. Para esta ocasión, un grupo de investigadores en el Centro Médico de la Universidad de Columbia, realizaron unas cuantas configuraciones moleculares para jugar un poco con el sistema inmune, de modo que algunas células se conviertan en la grabadora de datos más pequeña del mundo.
El futuro de los diagnósticos médicos
Para poder monitorear cualquier anomalía en el organismo, ya sean diagnósticos de enfermedades o los efectos de algún medicamento, estos científicos experimentaron con un microbio conocido como Escherichia coli. Como resultado, la bacteria no sólo registra las interacciones en el cuerpo, sino que deja una pequeña marca de dicha información.
“Después de ser ingerida por el paciente, esta bacteria podría observar y registrar los cambios que se experimentan a través del tracto digestivo, proporcionando así una vista sin precedentes a este maravilloso fenómeno”, dijo Harris Wang, un profesor y asistente del estudio en el Departamento de Patologías, Biología Celular y Biología de Sistemas en el CUMC.
Según la revista Science, Wang y sus compañeros de laboratorio crearon esta microscópica grabadora a base de un sistema inmunológico llamado CRISPR-Cas, que se encuentra en muchas especies de bacterias. Este funciona copiando el ADN de algunos virus invasores para guardar su información y asegurar que las generaciones posteriores de las bacterias los repelan con mayor efectividad.
Cabe mencionar que este proyecto también tiene objetivos secundarios relacionados con el medio ambiente, ya que también se podrían observar los cambios climáticos con mayor detalle.
Tan sólo imaginen cómo serían las cosas en el futuro; todo el mundo podría detectar enfermedades graves antes de que sea demasiado tarde y no tendrían que asistir a consultas médicas que se toman todo el día. Todos los diagnósticos estarían al alcance de algún dispositivo, tal vez los relojes inteligentes o algo por el estilo. No hay duda que el futuro que veíamos en las películas está tocando a nuestra puerta.