Actualmente nos enfrentamos a la llamada triple crisis planetaria: al cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad.
Por Mariana Castro Azpíroz
Tenemos todas las crisis planetarias al 3×1. Promoción válida para México al 31 de diciembre de 2022.
Ojalá fuera una oferta que sí pudiéramos rechazar, pero lamentablemente se trata de una realidad. Por una parte, nos enfrentamos a la llamada triple crisis planetaria, que se refiere al cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad. Estos tres problemas están interrelacionados y perjudican gravemente la salud de nuestro planeta y de sus habitantes.
Por otro lado, el 31 de agosto pasado, en México se terminaron oficialmente todos los recursos naturales que el país podía producir en 2022. La fecha se calcula anualmente para cada país por la Global Footprint Network, pero también se hace un promedio de consumo global, con lo que obtenemos el Día de Sobrecapacidad de la Tierra. Este año ocurrió el 28 de julio, así que excederemos la capacidad de los ecosistemas mundiales para regenerar los recursos naturales en un 74%. Si todas las personas consumieran al ritmo que se hace en la India, solamente necesitaríamos el 80% de los recursos del planeta. Pero si lo hiciéramos como Estados Unidos, necesitaríamos 5.1 Tierras al año para sostener a la población.
“Hot Sale”
El Potencial de Calentamiento Global (PCG) mide la cantidad de calor que puede atrapar cada tipo de gas en un periodo de tiempo determinado, comparado con el dióxido de carbono, al cual se le asignó un valor de 1. Pero, ¿quién quisiera conformarse con eso? ¡Aquí presentamos una línea completa de gases con PCG cada vez más alto! El gas metano retiene 25 veces más calor que el CO2 y se mantiene alrededor de 15 años en la atmósfera. Pero si lo que buscas es durabilidad, el dióxido de carbono es tu mejor opción, porque permanece en la atmósfera entre 100 y 150 años. Estos dos gases se suman al ozono, vapor de agua y óxido nitroso para ser los principales gases de efecto invernadero (GEIs). Otro tipo de gases como los hidrofluorocarbonos (usados como refrigerantes y antes en aerosoles) alcanzan un PCG de 14,800. ¡Estos valores no los encuentras en ningún otro lado!
Además, obtener estos gases es muy sencillo. Prácticamente todas las actividades humanas generan emisiones: transporte, agricultura, incluso hacer funcionar cada edificio. Dos tercios de las emisiones de GEIs a nivel mundial están ligadas a hogares. Una única búsqueda en Google utiliza suficiente energía para mantener un foco de 60 Watts encendido por 17 segundos y genera 200 mg de dióxido de carbono. SEOTribunal.com calcula que se hacen 5.6 mil millones de búsquedas al día.
Pregunte con compromiso
Llévele, llévele: sobrepesca, deforestación, desertificación, pérdida de hábitat… tenemos de todo para acabar con la biodiversidad. Podría surgir la pregunta “¿y eso en qué afecta, además de la extinción de especies?”. Pues sus consecuencias van desde escasez de alimentos y agua, hasta desplazamientos y muertes por desastres naturales, e incluso pérdidas económicas. La aseguradora Swiss Re reportó en 2021 que si no mitigamos los efectos del cambio climático, podría costar 23 billones de dólares al año en PIB a la economía global. Así que no importa cuál sea la motivación, todos tenemos un compromiso con el planeta.
Viendo el panorama completo, los GEIs causan que los glaciares se derritan y el nivel del mar se eleve; provocan pérdida de cultivos y de zonas aptas para la agricultura, mayor incidencia de desastres naturales (han aumentado 5 veces en los últimos 50 años), proliferación de epidemias y enfermedades, entre muchas otras consecuencias que ponen en peligro al ambiente y a todos los seres vivos. Por eso aquí van rubros en los que podemos enfocarnos para tomar acción contra la triple crisis planetaria.
Llegaron las rebajas
La campaña “Actúa ahora” de las Naciones Unidas está dirigida a acciones que cada individuo puede llevar a cabo para mitigar la crisis climática. Nuestro estilo de vida puede ser la fuente de varias soluciones, así que es momento de las rebajas… pero en nuestro consumo. Y si te gustaría poder dar seguimiento a tus hábitos ecológicos, hay una app para eso. “AWorld”, o “Mundo A” (porque no hay planeta B), te permite ver cuánta agua y electricidad ahorras y tu impacto en términos de CO2. Además incluye tips para llevar una vida más sustentable.
El primer punto a atacar es la energía. La mayoría de la electricidad y el calor que utilizamos diariamente proviene de la quema de combustibles fósiles (lo cual genera GEIs). Ahorra energía en tu hogar, tanto con electrodomésticos más eficientes como reduciendo tu consumo al mínimo necesario. Busca proveedores de energía más limpia cuando sea posible. Opta por transporte público, bicicleta o caminar más seguido que viajar en auto o avión.
Nuestro siguiente objetivo es la comida. Su ciclo de vida es una importante fuente de GEIs: desde la producción y el transporte hasta el consumo y el desecho de los residuos. Cada 45 kg de basura orgánica en un relleno sanitario generan 3.8 kg de metano que terminan en la atmósfera. Una sola vaca produce entre 70 y 120 kg de metano anualmente. El ganado vacuno que se cría específicamente para producción de carne a nivel mundial emite al menos 105 millones de toneladas de este gas al año. Prepárate para los descuentos en tu huella ecológica comprando alimentos locales y de temporada, reduciendo tu consumo de carne, no desperdiciando comida y haciendo composta con los residuos orgánicos.
El Buen Fin
Finalmente, ¡alza la voz! Comunicar los problemas ambientales para llevarlos tanto a la agenda política como a la ciudadanía es un trabajo que podemos hacer todas las personas. Mientras más gente esté consciente del problema—y de las posibles soluciones—habrá más acciones individuales que sumar a un esfuerzo colectivo. La campaña “Race to Zero” busca movilizar acciones entre ciudades, regiones, empresas e inversionistas con el fin de reducir las emisiones a la mitad en 2030 y alcanzar la meta de cero emisiones para 2050.
Nuestro modelo actual de consumo es insostenible. Si fuera posible exigiríamos un reembolso, pero como no es el caso, habrá que comenzar a saldar nuestra deuda con el planeta. Si logramos retrasar la fecha de sobrecapacidad de la Tierra 4.5 días cada año, para 2050 estaremos dentro de los límites planetarios.
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Mariana Castro Azpíroz estudió biología molecular en la UAM Cuajimalpa. Ha realizado investigaciones en colaboración con el Centro de Investigaciones Biológicas y Acuícolas de Cuemanco (CIBAC, UAM-X); además, se ha dedicado al cuidado y conservación de especies acuícolas endémicas. Desde 2019 se dedica a la divulgación científica y actualmente hace educación ambiental a través de redes sociales.
