Quienes ven documentales en internet o televisión, saben que nuestro planeta está lleno de fantásticas formas de vida, que se presentan distintas formas, tamaños y colores. Algunas de estas ya han sido documentadas desde hacía tiempo pero otras, como el Dragón Rojo, son consideradas en extremo raras por sus pocas apariciones.
¿Qué es un Dragón Rojo?
El espécimen, que también es conocido como Phyllopteryx dewysea, es un dragón marino súper raro que hasta ahora no se había podido documentar con vida. De hecho, sólo se conocía de su existencia por las muestras de ADN pertenecientes a restos que los científicos encontraron en la playa.
Uno pensaría que los dragones marinos son criaturas gigantescas capaces de devorar a un ser humano como si fuera un taco de suadero, pero la ciencia dice cosas muy diferentes. En realidad, estos son peces emparentados con los caballitos de mar, y hasta hace poco, sólo se conocían dos especies: el Phyllopteryx taeniolatus (dragón marino común) y el Phycodurus eques (dragón marino foliaceo).
Como varias criaturas marinas cuya existencia era desconocida, el Dragón Rojo fue difícil de encontrar debido a que vive en zonas más profundas del océano, en comparación con sus parientes. Los biólogos del Instituto Oceánográfico Scripps, en la Universidad de California lo hallaron a 55 metros de profundidad. Mucho más abajo del límite habitual dentro del submarinismo deportivo.
Al hallar a este pequeño y bello amigo en el Archipiélago Recherche, que se encuentra frente a las costas de Australia, los científicos organizaron una búsqueda para poder grabarlo. Después de horas de trabajo, se obtuvo el clip que les mostramos arriba.