Un sujeto en Florida está demandando a Apple por la astronómica suma de $10 mil millones de dólares. ¿La razón? Asegura que Apple le robó la idea del iPhone al haberlo lanzado hace nueve años.
El hombre en cuestión es Thomas S. Ross, quien hizo una solicitud de patente para un ‘dispositivo electrónico de lectura’ (ERD, por sus siglas en inglés), un gadget portátil con una pantalla, en 1992.
En la demanda se menciona:
Él fue el primero en presentar un dispositivo diseñado y agregado como para crear una combinación novedosa de multimedia y herramientas de comunicación… cuya identidad fue, desde entonces, robada y explotada por los iPhone, iPad y otros de Apple.
Por supuesto, esto no serviría de nada si Ross no tuviera ninguna prueba y es por ellos que en la demanda están incluidos los dibujos originales para la patente. Ross afirma que la reproducciones de Apple ‘son sustancialmente iguales a sus dibujos técnicos para el ERD y que los dispositivos tridimensionales derivados (iPhone, iPod, iPad), representan su estética y sensación no funcional’.
Y pues nada. Honestamente es difícil decir si este hombre habla con la verdad o solamente aprovecha el parecido de sus dibujos al dispositivo de Apple, especialmente porque ya había dispositivos parecidos ese concepto para entonces como los asistentes Newton o las cosas que fabricó Palm.
Al final, ustedes pueden decidir por ustedes mismos si sus conceptos realmente son muy parecidos al iPhone al ver sus dibujos:
Pero este hombre no se conformará sólo con los $10 mil millones que busca sacarle a Apple, también afirma que se le deben una buena cantidad de regalías por todas as ventas de los dispositivos de Apple en el futuro, lo cual serían varios miles de millones de dólares al año.
No obstante, la patente de Ross nunca fue aprobada debido a que no consiguió pagar las tarifas necesarias y su solicitud se declaró abandonada en 1995. Aún así, él afirma que Apple recurrió a ‘buceo en basureros’ al diseñar el iPhone y dispositivos subsecuentes.
La demanda señala:
En lugar de crear sus propias ideas, Apple escogió adoptar una cultura de ‘buceo en basureros’ como estrategia de investigación y desarrollo.
La demanda también cita a Steve Jobs quien una vez dijo que ‘siempre hemos sido descarados con robar grandes ideas’ y afirma que Apple le ha causado a Ross un ‘gran e irreparable daño que no puede ser compensado o medido con dinero’.
Ciertamente no todas las ideas de Apple han sido propias y seguramente Ross tienen algunos argumentos para defender su punto pero, honestamente, no lucen lo suficientemente solidos por lo que dudamos que pase algo con esta demanda.
