La solución más fácil es “no comerla” o “no comprarla”. Sin embargo, ya estamos a mediados de enero y su propósito de bajar de peso se complica porque ya van 2 kilos de más, ¿no? Claro que sí.
Bueno, como leyeron en el título, la Ciencia ha descubierto una forma para que le bajen a la comida chatarra en caso de que eso sea lo que quieren hacer y es bastante sencillo. Fue el Journal of Marketing Research (o JMR pa’ la banda) quien realizó esta investigación.
Nosotros pensamos que sin comida chatarra, la supervivencia del ser humano se vería complicada y sin sentido, pero cada quién.
Esto dijo el JMR:
“Descubrimos que cuando le das a elegir a las personas el comer comida que sea relativamente dañina, tienden a comerla cuando no necesitan moverse para obtenerla”.
Sin albur.
Es decir, si quieres bajarle a tus consumo, lo que debes de hacer es pararte y prepararte tu propia hamburguesa, cortar tu propia pizza, servir tu propia sopa instantánea, etc. y evitar que tu mamá o alguien lo haga por ti.
“Pensamos que este comportamiento se da porque cuando no te involucras en servir tu propia comida, es más fácil rechazar la responsabilidad por comer bien y no te sientes tan mal por tu consumo irresponsable, pues fue culpa de alguien más”.
O también puedes usar fuerza de voluntad, lo que prefieras.