El espacio está lleno de toda clase de misterios y cosas que aún no alcanzamos a comprender, cosas como los FRBs (siglas para fast radio bursts o algo así como ‘explosiones rápidas de radio’).
Estás brevísimas señales han sido escuchadas por astrónomos desde hace varios años y hasta ahora, no sabían de donde vienen, sin embargo, muy recientemente científicos pudieron revelar de donde provenía una de estas señales de radio. Estas señales solo duran por un instante, sin embargo, en solo un milisegundo pueden liberar más energía que la que el Sol emite en 10 mil años.
El FRB en cuestión fue hallado muy lejos de nuestra galaxia, aproximadamente a 6 mil millones de kilometros de distancia. No obstante, a pesar de que encontraron el lugar de origen, lo científicos aún no han podido averiguar sobre que son exactamente estas señales del espacio profundo.
Por supuesto, esto genera toda clase de especulaciones y, por supuesto, una de ellas es que estas señales podrían ser enviadas por extraterrestres.
Algo muy extraño sobre los FRB es que solo ocurren una vez en una locación y, al menos hasta donde los astrónomos saben, jamás se repiten.
Jill Tarter, co fundadora del centro del SETI (Search for Extraterrestrial Intelligence) menciona que el hecho de que estas señales duren tan poco y no se repitan es todo un misterio.
Tarter tiene una idea sobre esto y, aunque admite que puede ser algo descabellada, no es completamente imposible y es que menciona que los FRBs pueden ser señales de alguna especie extraterrestre apoderándose de un planeta a la vez.
Tarter menciona:
Si ellos saben que planetas pueden sostener vida en la galaxia… entonces, quizás podrían eliminar estos planetas habitados uno por uno, secuencialmente.
Lo cual podría proveer una señal que se muestra una o, tal vez, dos veces y nunca volver a aparecer por un periodo totalmente desconocido.
Por supuesto, esta es solo una teoría de varias que hay sobre estas señales. Algunas menos descabelladas son que se trate de el nacimiento de una nueva estrella, la posible colisión de un par de agujeros negros o incluso la colisión de dos estrellas neutrón.
Aún a pesar de las especulaciones, el simple hecho de haber descubierto el lugar de donde provino el FRB constituye un gran avance en el tema.
Simon Johnston, quien es el jefe de astrofísica en CSIRO (Commonwealth Scientific and Industrial Research Organisation) en Australia y quienes descubrieron la señal, mencionó en un comunicado de prensa:
Nuestro descubrimiento devela una manera de averiguar qué es lo que produce estas señales.
Muchas cosas que procesar con este descubrimiento, incluyendo posibilidades aterradoras, pero el descubrimiento podría lograr que algún día podamos descifrar este misterio (y, quizás, lamentarlo).