Amazon está imparable. Apenas en septiembre del 2020, la firma de Jeff Bezos obtuvo la aprobación de la Administración Federal de Aviación en Estados Unidos para poder repartir paquetería a través de drones y ahora, vuelve a sorprender al mundo entero con Amazon One, el nuevo sistema de pago con el que solo necesitarás la palma de la mano para comprar.
Eso de ‘Todo con el poder de su firma’, ha quedado en el pasado. La apuesta del gigante del comercio electrónico es un dispositivo biométrico que utiliza algoritmos y hardware personalizados para que una vez que los usuarios se registren, el software creará un identificador único de cada persona. De tal manera, que bastará con que los suscriptores de este programa muestren su mano para que el sistema escaneé todos sus datos.
Pero, no solo será un nuevo método de pago, cada archivo personal encriptado, también puede almacenar tarjetas de fidelidad, tarjetas de descuentos, almacenar contactos, ubicaciones y hasta boletos para el cine u otros espectáculos. Sin embargo, primero deberán probar que Amazon One funciona al 100%. Para ello, empezarán a implementar este sistema como una alternativa de pago en 20 de los establecimientos ‘Amazon Go’ en Estados Unidos.
Con el nuevo sensor no será necesario ni sacar el teléfono del bolso o el bolsillo. Bastará con pasar la mano por encima de un sensor en el torniquete de entrada a la tienda. De acuerdo con El Mundo, ni siquiera será necesario tener una cuenta de Amazon o la app oficial para pagar. Amazon permitirá asociar un número de teléfono y una tarjeta de crédito a la imagen de la palma de la mano
No todo lo que brilla es oro
Una vez que la fase de prueba haya finalizado, la firma implementará Amazon One, tanto como método de pago en su tienda online, como en las tiendas adicionales. Con la visión que ha tenido la compañía, este no será el momento de parar. Su próximo objetivo será ofrecer el servicio a terceros, como minoristas, estadios y edificios de oficinas para conquistar el mundo entero.
Sin duda, esta tecnología es sorprendente. Pero también tiene un amplio margen de desconfianza, sobre todo si se trata del manejo de datos personales entre terceros. En un principio, Amazon había señalado que el nuevo dispositivo estaba diseñado para hacer las compras más eficientes al mejorar el tiempo de pago. Pero ahora, está promoviendo su uso como medida para evitar el contacto entre humanos en medio de la pandemia por COVID-19, lo que suena como un gancho publicitario.
En esta era donde la privacidad y los datos personales se venden a diestra y siniestra al mejor postor, lo único que nos queda por conservar para nuestra seguridad son los datos biométricos y sobre todo algo tan delicado como las huellas digitales. En el mundo digital hay que desconfiar de todos, incluso del Amazon One.