Todo lo que toca (o mejor dicho escribe) Stephen King, se convierte en oro. Sin duda, es uno de los autores más exitosos con millones de copias vendidas en todo el mundo, y nos atrevemos a decirlo, también es uno los escritores (sino es el que más) que más adaptaciones a la pantalla grande ha tenido con clásicos del cine de suspenso y terror como Pet Sematary, Carrie, Misery, It, Cujo, entre otras.
Una de las más destacadas es la novela de The Shining, la cual se publicó en 1977 y se convirtió en un best seller que navega entre el terror y la fantasía. Aquí conocemos a Jack Torrance, un hombre que es absorbido por la locura en un hotel lleno de entidades que absorben, por así decirlo, el alma de las personas, sobre todo de aquellos que son “shining”, es decir, pueden comunicarse con los demás a través de poderes telepáticos o sentir presencias fuertes. Danny, el hijo de Jack, es un niño con estas cualidades que debe escapar de la locura de su padre.
En 1980, Stanley Kubrick decidió adaptar la novela de King en una película homónima que se ha convertido en una clásico de culto del género de terror y la historia del cine en general. Sin embargo, aquellos que leyeron el libro y vieron la película, descubrirán que los elementos clave de la novela no están presentes en la obra de Kubrick (sí, King odió la película y la seguirá odiando por siempre).
Así es como surge una pregunta: ¿Cómo conciliar las dos partes en una secuela fílmica?, ¿cómo satisfacer a los fans de King (los más aguerridos) y los fans de Kubrick (la mayoría) en una película? La respuesta fue Mike Flanagan, un director que ha dedicado su carrera al terror, y que ahora dirige Doctor Sleep, la continuación “oficial” de la novela The Shining que recupera aquello que se quedó fuera de la película en 1980 pero sin dejar de lado el imaginario visual que Kubrick quedó.
En Doctor Sleep conocemos a un Danny adulto, un sujeto que vive con los traumas del pasado en relación a los sucesos del Overlook Hotel, lugar donde su padre intentó asesinarlo a él y a su madre, pero que en un halo de realidad, decide dejarlos ir (esto en el libro). En esta novela de 2013, Danny es un alcohólico que “tapa” sus poderes shining con la bebida. Un día decide dar un cambio de 180 grados a su vida, recuperando sus dones y entrando en contacto con Abra, una poderosa niña que se encuentra en peligro ante la presencia de Rose the Hat, una mujer que se dedica a secuestrar niños shining, torturarlos y matarlos y vivir de su “vapor” (algo así como su alma).
Danny debe enfrentar su pasado en el Overlook Hotel para ayudar a Abra a derrotar a Rose the Hat. Ewan McGregor fue anunciado en el proyector de manera oficial en 2018, y después de un año de dudas, es que Warner estrena Doctor Sleep. Sopitas tuvo la oportunidad de vivir una experiencia en el Stanley Hotel, lugar que inspiró a Stephen King a escribir The Shining en los 70. De paso, platicó con Flanagan sobre los retos de esta adaptación y la importancia de algunos detalles del filme como elegir el número de habitación.
Nota: En The Shining, Danny entra a una habitación donde se encuentra un ente en forma de mujer que lo lastima. En la novela el número de habitación era 217, pero en la película, Kubrick decidió poner 237.
Acá les dejamos la entrevista completa con Mike Flanagan: