Las plataformas de streaming de audio, pero sobre todo las de video, se han convertido en una de las fuentes más grandes en las que las personas acceden a contenidos de entretenimiento como películas, series, programas y más. Esto ha presentado una ventaja para los consumidores, pues se les ha otorgado el poder de decidir cuándo, dónde y qué ver.
A pesar de que los prestadores de servicios de televisión de paga abrieron la cartera de producciones nacionales, pero sobre todo internacionales, siempre el consumidor se debía apegar a la programación. Con las plataformas de streaming es distinto, e incluso si una serie original no tiene buenos números, no se continúa con la producción. El mejor ejemplo es Sense8, la cual fue cancelada porque no fue proporcional el costo de producción a su audiencia.
En México cada vez más personas se registran en plataformas de streaming de video como Netflix, Prime Video, HBO Go, Blim, entre otras. Entre estas razones, es que se promovió un proyecto de decreto para que estas empresas tengan en su catálogo al menos 30 por ciento de contenido nacional o producciones mexicanas.
De acuerdo con El Universal, esta iniciativa “reforma y adiciona distintas disposiciones dentro de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión” para que haya más contenidos originales nacionales, todo esto a partir de la propuesta del senador Ricardo Monreal de Morena. Hasta el momento, sólo fue aprobada en las comisiones. Esto quiere decir que no se ha aprobado y todavía no entrará en vigor.
Ahora bien. Este proyecto de decreto sólo aplica a prestadores de servicios de televisión de paga vía internet; es decir, las plataformas de streaming de audio se quedan fuera. ¿La razón? No hay contenido original ni tienen la capacidad de alterar las producciones a diferencia de las de video donde ahora producen y distribuyen.
Esto aplicaría a las plataformas de internet que estén autorizadas frente al Instituto Federal de Telecomunicaciones. Tendrán cuatro meses para cumplir con 20 por ciento de contenidos nacionales cuando el decreto entre en vigor, y un año para llegar al 30 por ciento establecido desde el principio o como lo marca el proyecto. La empresas que le deberán entrar a esta iniciativa son Netflix, Claro Video, Blim, HBO y Disney+. Como podemos ver, no sólo son plataformas internacionales, sino también nacionales.
Esta iniciativa ya llevaba varios meses en la mesa, donde también se habla de un impuesto (IVA) de las plataformas digitales que ofrecen el servicio. En este tema, también se involucra el contribuyente (la empresa) y el asociado (usuario que descargue), el cual también deberá “recaudar y enterar el impuesto“. La pregunta es: ¿Subirá el costo del servicio?
El mismo medio indica que al año de que entre en vigor, 360 días contados, habrá un impuesto especial a estas mismas empresas, o la menos las que sus ventas anuales en México “sean iguales o superiores a 800 millones de pesos“.