Game of Thrones, como lo hemos mencionado, es una de las series más populares de la actualidad. Se convirtió en un fenómeno de la televisión que destacó por su producción y el desarrollo de la historia y los personajes basados en las novelas escritas por George R.R. Martin.
La calidad de su producción no se pone en duda con distintas locaciones, un sinfín de personajes a interpretar y la edición que se requiere para presentar dragones, castillos, muertes y muchos, muchos white walkers. La última temporada, con el primer episodio liberado el domingo 14 de abril, representa el punto más alto para los creadores, al grado de que gastaron millones de dólares por episodio…
De acuerdo con Los Angeles Times, Game of Thrones gastó un total de 15 millones de dólares por cada uno de los seis episodios. Pero no es de extrañarse. Desde antes del estreno, los productores David Benioff y D.B. Weiss revelaron que más que capítulos de una serie, eran películas de casi una hora (a veces más, a veces menos).
El costo se elevó a 15 millones por la cantidad de países donde se filmó. Iban de Irlanda del Norte, Croacia, Islandia a Marruecos, por mencionar los más importantes. En total, en las ocho temporadas, se fueron a filmar a más de 10 países. Y con esto también llegaron las casas productoras con las que trabajaron en los países, las cuales suman un total de 13 nacionalidades.
Y las cifras sigue aumentado si consideramos todos los materiales que se utilizaron constantemente en las primeras siete temporadas y la producción de la octava. Las muertes eran hasta cierto punto, necesarias en Game of Thrones. De este modo, se utilizaron 4 mil galones de sangre falsa. Winter is Coming? Sí, con unas 52 mil bolsas de papel para simular la nieve. Para que nos crean que fue una producción sin precedentes en la historia de la televisión, les van más datos:
1.5 toneladas de metal para producir las armas
mil 300 escudos
12 mil 137 pelucas
mil 700 kilos de hule o goma
12 mil 986 extras mientras filmaron en Irlanda del Norte
4 mil galones de sangre falsa
52 mil bolsas para simular nieve
Los número son sorprendentes, pero parecen más que obvios. En algún punto, Game of Thrones dejó de ser una serie de culto para convertirse en algo más grande que ha conquistado a las audiencias a nivel mundial. Algo contrario a lo que suele suceder con las series que, mientras pasan temporadas, pierden interés. GoT fue todo lo contrario.
El estreno del primer episodio de su última temporada fue la prueba de ello. Con el final de la serie en su octava temporada, llega la pregunta obligada: ¿Qué sigue ahora?, ¿se volverá a repetir este fenómeno con alguna otra producción, será posible eso? Y también se pone a discusión el destino de HBO.
Esta plataforma, responsable de Game of Thrones, tiene grandes series en su catálogo como True Detective, Big Little Lies, la serie limitada Sharp Objects y más; sin embargo, ninguna ha alcanzado el éxito de la lucha por conseguir el Trono de Hierro. HBO, de acuerdo con el mismo medio, contó 32.8 millones de audiencia en 2017 con la séptima entrega mientras en la primera temporada, contó apenas 9.3 millones.