Varazdat Haroyan, capitán de la Selección de Armenia, dejó el futbol hasta nuevo aviso a sus 28 años de edad, para enlistarse en el ejército de su país y participar en el conflicto bélico que su país mantiene con Azerbaiyán por el territorio de Nagorno Karabaj.
El gobierno de Armenia hizo una petición a los hombres menores de 40 años para nutrir el ejército durante este conflicto bélico, el cual explotó el domingo 27 de septiembre, de modo que el futbolista desechó el fichaje con el Larissa de Grecia.
Haroyan es defensa central y hasta la temporada pasada jugó con el Ural de Rusia y tenía prácticamente todo hecho para fichar con el Larissa cuando el gobierno de Armenia comenzó la campaña para reclutar hombres para hacerle frente de Azerbaiyán.
¿Por qué Armenia pide efectivos?
Para responder esta pregunta debemos entender los antecedentes bélicos de estos dos países por el territorio de Nagorno Karabaj, el cual inició a inicios del Siglo XX, cuando se declararon independientes del Imperio Ruso, pero detuvieron su guerra cuando fueron unidos a la Unión Soviética.
Reanudaron el conflicto en la década de los 80 hasta 1994, cuando firmaron un acuerdo para el cese de hostilidades y Armenia fue declarado como ganador de la guerra, en la que murieron más de 30 mil personas.
Desde entonces, el territorio de Nagorno Karabaj forma parte del territorio de Azerbaiyán, pero es habitada en su mayoría por armenios, que también gobiernan el lugar.
Azerbaiyán, un país petrolero, ha invertido desde hace varios años en fortalecer su ejército y ahora cuenta con material suficiente como para afrontar una guerra larga con Armenia, que ahora debe nutrir su ejército de alguna manera, por lo que ha llamado a civiles a reclutarse.
En 2016 ya hubo un conflicto que fue llamado “Guerra de los Cuatro Días”, precisamente por su duración, en el cual Azerbaiyán se declaró ganador.