¿Qué tiene que suceder para ponerle un alto a la violencia en el futbol? La normalización del odio al rival y estar dispuesto ‘a todo’ por una camiseta nos deja eventos incluso mortales, como el Gimnasia vs Boca en Argentina.
El partido de Liga fue suspendido por violencia en las gradas; sin embargo, también hubo falta de garantías de seguridad. Para “controlar” las cosas, la policía lanzó bombas de gas lacrimógeno que incluso afectó a los futbolistas y cuerpos técnicos en la cancha.
La campal entre aficionados de Gimnasia y la misma policía desató incertidumbre y terminó con muchos heridos… e incluso un fallecimiento. Es bien sabido que en los estadios argentinos no hay presencia de afición visitante, pero la gente de Boca también vivió la tensión.
Los ecos de la violencia tras 9 minutos de partido entre Gimnasia y Boca
Las imágenes de la gente de Gimnasia intentando resguardarse lo dicen todo. Niños en brazos de sus padres, lágrimas de grandes y chicos, que intentaban cubrirse el rostro para evitar los efectos del gas. Pero desafortunadamente, se confirmó la muerte de un fan: Carlos Regueiro.
Su hermano habló ante los medios de comunicación y denunció que las agresiones en el Gimnasia vs Boca fueron de la policía y no entre aficionados; además, relató que él trabajó con los servicios de emergencia de Buenos Aires y que esto pudo ser mucho peor.
“A mi hermano lo mató la represión policial. Mi hermano es un tema de seguridad. Mi hermano fue a ver un partido de futbol como fue toda la gente a la cancha. A mi hermano y a las personas en la cancha los agredió la policía. Que den gracias que solamente pagó mi hermano porque pudo haber sido una tragedia. No se iba a evitar porque esta fue una causalidad”.
Franco Soldano, la voz de los futbolistas entre la tragedia
Guillermo Enrique fue uno de los jugadores de Gimnasia que estuvo al pendiente de la afición que bajó a la cancha para resguardarse; sin embargo, todos los futbolistas vivieron la situación de diferente manera. La familia de Franco Soldano estuvo en el estadio y su prioridad era encontrarlos para saber que estaban bien.
El padre del atacante incluso se puso a atender a los heridos tras la suspensión del duelo ante Boca. Junto a él había mujeres, niños y bebés. Por ello, Soldano lamentó que el futbol argentino haya caído en un punto en el que la violencia impide la presencia de visitantes en las canchas.
“Me habrá llevado 45 minutos encontrar a mi familia, fueron los 45 minutos más largos de mi vida. Cuando iba buscando veía la desesperación de la gente, que la estaba pasando realmente muy mal. Mi papá es médico, se puso atender gente en la platea también. No había tampoco ambulancia, nada. Hasta que le dije que por favor se vaya adentro, que priorice a mi señora, estaba mi hermana también con un bebé de 4 meses, es su hija. Muy triste todo.
“El problema es ese, si nos acostumbramos a esto ya… Dejamos que no vayan los visitantes, hay partidos que ni siquiera puede entrar toda la gente al estadio. El sueño de todo chico que juega a la pelota es tener una noche como la de hoy, jugar contra Boca, con el estadio lleno, peleando el campeonato, con tu familia viéndote, y vivir una noche como la de hoy toda esa ilusión que uno tiene de chico se derrumba porque te das cuenta que lo realmente importante es otra cosa“, declaró en entrevista para ESPN.