La temporada que está teniendo el Sheffield United (aunque a veces el VAR no ‘ayude’) está siendo simplemente magnífica. Es un equipo que recién ascendió, que buscaba en un inicio mantenerse en la Premier League pero que hoy en día ha sido uno de los rivales más complicados en la liga, pues así como los Wolves lo han hecho desde hace un año, ambos se han convertido en los ‘caballos negros’ de este torneo y sería por 3 similitudes muy marcadas entre ambos equipos.
El Sheffield United se ha consolidado de gran forma en la Premier League. Pese a que no está aún en puestos de competencias europeas están muy cerca de llegar y meterse de lleno a la pelea y no sólo de Europa League, algo que es probable que consigan, sino que incluso han puesto en un predicamento al ‘Top 6’ por los puestos de Champions League.
Los Wolves llevan ya un año dentro de la Premier League y saben muy bien cómo jugar para seguir escalando posiciones pero lo que ha trabajado el Sheffield United es de aplaudirse, pues equipos de mayor ‘trayectoria’ como es el West Ham, Crystal Palace, Southampton, entre otros, no han estado ni cerca de la parte media de la tabla.
Veamos algunas de las similitudes que hay entre el Sheffield United y los Wolves para ser considerados los ‘caballos negros’ de la Premier League
Experiencia en el banquillo
Los Wolves tienen a Nuno Espírito Santo, un técnico que es ‘nuevo’ dentro de su cargo pues sólo lleva 8 años dirigiendo pero tiene el suficiente recorrido para estar en un sitio privilegiado dentro de la Premier League. Sus antiguos equipos e incluso los ‘fracasos’ que ha sufrido, le enseñaron a cómo manejar a un equipo y así ha consolidado una gran base. Algo así pasa con Chris Wilder, DT del Sheffield, quien lleva casi 20 años como técnico pero sólo ha estado en 4 equipos.
La constancia y seguir una estrategia de trabajo ha sido el factor determinante para estar en lo más alto de la Premier League. Ambos lo han dicho en algunas ocasiones, conocer a sus jugadores, saber a lo que juegan y reconocer casi de inmediato sus fortalezas, es la experiencia que han ganado y que han transmitido en el campo.
De la ‘humildad’ a lo más alto
Ambos son (o eran) equipos ‘humildes’ que llegaron de la Championship con una ilusión. Nadie creía en ellos en un inicio, pocos daban algo por creer que podían llegar alto y hoy en día son de los favoritos del público. Quizá no están al nivel del Manchester City o del Liverpool pero no hay que perderles la pista, pues en cualquier momento podrían dar la sorpresa como el Leicester hace unos años.
El no tener tantos reflectores, la presión de ganar sí o sí cada jornada y saber el objetivo que persiguen, ha sido parte fundamental para que tanto los Wolves como el Sheffield escalen cada vez más.
Sociedad dentro del equipo
En ambos equipos es notorio que nadie juega por sí solo; todos se entienden a la perfección, dominan los movimientos de los compañeros y hay una sociedad casi en automático. Todos juegan por el equipo, por los resultados y por la victoria. No queremos decir que esto no suceda en el resto de los equipos pero sí hay que destacar la cohesión que hay en el Sheffield y los Wolves.
Esto se puede demostrar por ejemplo en la dupla que han hecho Adama Traoré y Raúl Jiménez. Ambos saben dónde juega el otro, saben los movimientos del otro y eso, en un 75% de las ocasiones, termina en gol.
