Cuando en una relación hay alguien que se muestra frío, la incomodidad empieza a pesar. La comunicación cada vez es menor, los detalles se terminan, las miradas se vuelven indiferentes y finalmente, todo termina por derrumbarse, como lo que le pasa a Neymar con el PSG.
Desde su lesión a finales de febrero, Neymar se la ha pasado de juerga y recuperándose en Brasil. El contacto que tiene con su equipo es mínimo y se concentra ahora en irse de fiesta o jugar póker con sus amigos en un casino.
Son muestras de que el astro está incómodo y quizá ya planea hacer maletas para irse a otro club, uno que le ofrezca un clima más cálido, con una afición que lo reciba como héroe, un vestidor a sus pies y más de 40 millones de euros.
Recordemos que el dueño del equipo Nasser Al-Khelaifi hizo una visita express acompañado del director deportivo Antero Henrique y del director de comunicación Jean-Martial Ribes a Brasil, donde hablaron con Neymar sobre sus planes y continuar con una relación que tenían proyectada por lo menos hasta el Mundial de Qatar en el 2022.
Pero a pesar de que se la pintaron bonito, Neymar les dijo que no según el diario El País y pedirá salir del club después del Mundial de Rusia 2018, para ver quién es el guapo que le ofrece un contrato mayor al de Cristiano o Messi. Además, no ha hecho química con Cavani, ni con otros iconos del club, con quienes se ha agarrado del chongo en el vestidor.
Las redes sociales de Neymar son como la novia indiferente que nos echa indirectas, las partidas de cartas, el bailar sobre un solo pie en el cumpleaños de su hermana y concentrarse solo en la Selección de Brasil, son muestra de que ya no estás gusto y quiere romper con su equipo.
“Parabéns rapaziada!!!! ALLEZ PARIS”, eso puso Ney en sus redes sociales tras la Semifinal del PSG ante el Caen.
Para que Ney pueda jugar en otro equipo la temporada que viene, deberá abandonar el PSG antes del 1 de septiembre, fecha de cierre del mercado de verano y tendrá que renegociar su contrato, ya que solo el PSG puede romper la cláusula que los vincula.
En palabras cristianas, esto quiere decir que Neymar tendrá que dejar ir los bonos, premios y compensaciones por lo que llegue a obtener en su corta estancia con los parisinos.
Entre que son peras o son manzanas, lo que queda claro es que Neymar no está a gusto ni con 40 mde en el banco, su próxima parada puede ser Madrid o Inglaterra, donde podría iniciar un nuevo romance y dar todo lo que nunca pudo en el PSG.