El sábado 22 de abril de 1989 los San Antonio Spurs perdieron 111-121 contra los Phoenix Suns para terminar con una temporada de pesadilla. Finalizaron con una marca de 21-61 y fueron el peor equipo de la NBA, pero los aficionados de la quinteta texana no sabían que ese día iba a cambiar el rumbo de la franquicia para siempre. Ese encuentro sería la última ocasión en que no jugaban un encuentro con David Robinson y Tim Duncan dentro de la plantilla, hasta la campaña 2016-2017.
Han pasado 27 años desde aquel momento y muchas cosas han cambiado para las espuelas. En ese momento jugaban en el HemisFair Arena, una de las duelas más pequeñas de toda la liga y fueron el segundo peor en cuanto a asistencia se refiere. En ese instante no contaban con un solo título en la NBA y rara vez eran protagonistas dentro de la postemporada.
Pero con la llegada de Robinson todo cambió y San Antonio se convirtió en una de las quintetas más dominantes de la liga, pero una vez que llegaban los playoffs, siempre se quedaban cortos y no podían llegar a las Finales de la NBA. Pero en 1997, un joven de la Universidad de Wake Forest, llamado Timothy Theodore Duncan , cambiará el rumbo de la ciudad de San Antonio y de la NBA para siempre.
A San Antonio le tomó dos temporadas desde la llegada de Tim Duncan para ganar su primer título de la NBA y a partir de ese momento se convirtieron en una de las franquicias más respetadas en el mundo deportivo. De 1999 al 2014, ganaron 5 campeonatos de la liga y en todas las temporadas terminaron con un registro superior a las 50 victorias, un récord en la historia de la NBA. Nunca se quedaron fuera de los playoffs y en total disputaron 6 finales de la NBA.
Pero toda historia tiene que llegar a su final y Tim Duncan anunció durante el verano que había terminado su carrera, ante la tristeza y de todos los aficionados de San Antonio. Estos dos hombres ayudaron a que se construyera una nueva arena, el At&T Center y que el basquetbol se convirtiera una religión en la ciudad. Ahora, sin Robinson y Duncan los Spurs tratarán de mantener su nivel de excelencia y ganar su sexto anillo. A pesar de su veteranía, cuentan con el talento para dar pelea en la Conferencia Oeste.
El nuevo líder del equipo será Kawhi Leonard y a pesar de su juventud ya es considerado como uno de los mejores jugadores de la NBA. A sus 25 años ha ganado el Premio al Jugador Defensivo del año en dos ocasiones y fue el MVP de las finales de la en el 2014. Si San Antonio quiere llegar lejos, necesitará que Leonard de el siguiente paso y se una a la conversación, junto a Kevin Durant, LeBron James y Stephen Curry como los mejores de la NBA.
Tony Parker y Emmanuel Ginobili se mantienen con el equipo, aunque ya no son los mismos jugadores de antes. Del 2003 al 2008, junto con Duncan, dominaron la NBA y guiaron a los Spurs a tres campeonatos. Para muchos expertos son el mejor trio en la historia de la liga. Su experiencia ayudará a la quinteta de Gregg Popovich en momentos complicados y como han demostrado en años pasados, una vez que llegan los playoffs tenerlos en tu equipo es una gran ayuda. Además, es muy probable que sea la última temporada que veamos a Manu con el jersey de los Spurs.
Para que un equipo se pueda mantener en la pelea, necesitan firmar a los ‘peces gordos’ durante el verano y es lo que ha hecho San Antonio en las dos últimas temporadas. El año pasado llegó LaMarcus Aldrige y ayudó a que los Spurs ganaran más de 60 encuentros, pero en la serie contra el Thunder, donde los texanos quedaron eliminados en 6 juegos, desapareció, pero en su segundo año bajo el sistema de Popovich se esperan grandes cosas de él. Pero no estará solo dentro de la pintura, durante el periodo de agencia libre, Pau Gasol decidió abandonar a los Chicago Bulls y firmó con los Spurs. Con estos dos hombres, más Leonard y Danny Green, la defensiva pinta para ser la mejor de la NBA.
La banca también se reforzó y David Lee será de gran aporte, cuando Gasol o Aldrige necesiten descanso. Patty Mills fue la razón para que Australia quedará en el cuarto lugar de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro y ayudará cuando Parker no pueda estar en la duela. Jonathon Simmons y Kyle Andersson fueron de gran ayuda la campaña pasada y esperan mantener el ritmo.
También contarán con dos argentinos más en sus filas, se sumaron Nicolás Laprovittola y Partricio Garino para continuar como una de las franquicias más internacionales de la NBA.
Los finales nunca son sencillos y el próximo 25 de octubre jugarán su primer encuentro sin Duncan o Robinson en sus filas desde 1989, pero los Spurs no tendrán excusas para no pelear por el Larry O’ Brien, ya que Gregg Popovich cuenta con uno de los mejores equipos de la NBA.