El futbol femenil internacional no deja de enfrentar condiciones complicadas. Ahora, las jugadoras del Rayo Vallecano alzaron la voz para pedir un mejor trato, que facilite su trabajo en el terreno de juego y fuera de él. Desde no tener un lugar para vivir, hasta no poder ni usar el estacionamiento del club, son algunos de los problemas que enfrentan.
No es la primera vez que el equipo denuncia este tipo de condiciones. Ni siquiera se trata de la igualdad salarial, porque en ningún momento piden un aumento en sus sueldos. La situación pasa por la falta de pagos y por las grandes diferencias que la misma directiva crea entre hombres y mujeres.
“Trabajamos en un escenario de gran desigualdad, en cuanto a instalaciones, material y personal, en comparación con nuestros compañeros del primer equipo masculino. Es por ello que nos vemos obligadas a denunciar de nuevo, de forma pública, la situación que sufrimos a diario“, explican las futbolistas en un comunicado.
¿Qué exigen las jugadoras del Rayo Vallecano?
En pocas palabras, se trata de igualdad. El Rayo Vallecano Femenil no tiene ni la mitad de las atenciones que el varonil y quedan de lado en los aspectos más básicos. La escuadra no cuenta con un gimnasio para ejercitarse, ni con un servicio médico que las atienda.
Las jugadoras no tienen conocimiento de la logística que refiere a sus partidos. Ya sean los viajes o alimentos planeados para ellas, nadie se los informa. Además, denuncian que ellas no tienen acceso al estacionamiento en las instalaciones del club, algo que sí es un recurso disponible para el equipo varonil.
Y uno de los aspectos más delicados es el económico. Algunos elementos del plantel femenil dependen de la directiva para tener un hogar, ya que el club paga rentas y de un tiempo para acá eso dejó de ocurrir. Por si fuera poco, los pagos se realizan fuera de lo establecido en el Convenio Colectivo para las futbolistas de Primera División.
“Las casas que el club ofreció a varias jugadoras del equipo han dejado de ser pagadas por la entidad. Las afectadas se ven en la calle sin ninguna solución posible. No recibimos el documento de las nóminas y cobramos siempre una semana después de final de mes“, agregan las futbolistas.
Nuestra situación laboral sigue sin ser digna de un equipo de Primera División.#UnidasSomosMásFuertes pic.twitter.com/iG84uOVAtC
— Patricia Larqué (@Plarque) November 6, 2021
Ante toda esta situación, el Rayo Vallecano Femenil protestó en la cancha. El partido vs Real Madrid de la Primera Iberdrola tuvo 20 minutos de inactividad después del silbatazo inicial. Las madrileñas lo entendieron y apoyaron al no buscar el balón y quedarse en sus lugares por el mismo tiempo.
No obstante, sigue sin haber postura del club y se espera que la ayuda vuelva en los próximos días. Estas situaciones son una constante en el mundo, pues hace algunos años Cecilia Santiago dio a conocer que el equipo femenil del América no podía entrar al comedor en Coapa.