Terminó el Draft 2018 de la NFL, fueron 256 picks que eligieron las 32 franquicias, pero hay cientos de jugadores que no corrieron con suerte de llegar a un equipo y otros, que tendrán que esforzarse al doble para ganarse un contrato definitivo, como el mexicano Luis Pérez.

Pérez no fue elegido en ninguna de las siete rondas del Draft, pero Los Ángeles Rams le extendieron una bonita invitación a su training camp para intentar ganarse un lugar en el roster de 53 jugadores.

Pérez es desde ya un orgullo nacional, ya que nunca ha habido un QB mexicano en la NFL y él podría serlo si muestra lo que hizo con Texas A&M-Commerce, su Universidad donde llevó a su segundo título.

“Me dije, el boliche lo tomas en cuenta para unos años, ¿el futbol americano? Nada más tengo una ventana muy pequeña, por eso decidí eso”, explicó Pérez.

Bajo su liderazgo, Texas A&M-Commerce fue primero en la División II de la NCAA, con récord 13-1 y 4,999 yardas por aire, fue reconocido con el Trofeo Harlon Hill que es el símil al Trofeo Heisman pero en su División.

Pérez estuvo hace poco con Johnny Manziel (¿alguien recuerda a este QB drafteado por los Browns?) en el Pro Day de Texas A&M, donde se ganó su lugar con los Rams. Tendrá que competir por un lugar con Brandon Allen y Sean Mansión.

Hace cinco años, Pérez era una estrella en el boliche, sin tener experiencia previa como QB, decidió entrarle a lo sabroso de las tackleadas y en solo dos años ya estaba rompiendo récords en su Universidad.

Le deseamos toda la suerte a este mexa, quien seguro la romperá con Los Ángeles Rams.

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