Donald Trump y su gobierno en Estados Unidos tal vez pasen a la historia como el menos popular en el mundo del deporte. Sus críticas y rechazo a los jugadores de la NFL que se arrodillaban durante el himno de Estados Unidos tuvo consecuencias, comenzado con la carrera de Colin Kaepernick y modificaciones en el reglamento, el cual prohibió a los jugadores hacer protestas en la ceremonia.
En la NBA, donde la mayoría de los jugadores son de raza negra, LeBron James ha manifestado desaprobación con sus políticas migratorias y la violencia. En el futbol femenil, Megan Rapinoe manifestó que no iría a la “Puta Casa Blanca”, por la intolerancia del presidente a las personas de la comunidad lgbtttiq y así podemos nombrar a varios atletas.
A ellos se les ha sumado ahora Race Imboden, esgrimista estadounidense, quien ganó la medalla de oro en los Juegos Panamericanos por equipos y durante la ceremonia de premiación se arrodilló en el podio mientras se escuchaba el himno de su país.
El también medallista olímpico en Río de Janeiro 2016 explicó después en su cuenta de Twitter que había tomado esa postura en el podio para expresar su rechazo a la violencia y racismo.
“Me siento honrado por representar al equipo de Estados Unidos en los Juegos Panamericanos, llevándome a casa un oro y un bronce. Pero mi orgullo se ha reducido por las múltiples insuficiencias en el país que llevo con tanto cariño en el corazón. Racismo, control de armas, maltrato a los inmigrantes”, publicó.
We must call for change.
This week I am honored to represent Team USA at the Pan Am Games, taking home Gold and Bronze. My pride however has been cut short by the multiple shortcomings of the country I hold so dear to my heart. Racism, Gun Control, mistreatment of immigrants, pic.twitter.com/deCOKaHQI9— Race Imboden (@Race_Imboden) August 10, 2019
Imboden realizó estas expresiones casi 10 días después del tiroteo en un centro comercial de El Paso, Texas, donde murieron más de 20 personas. Al menos ocho eran mexicanas y de acuerdo con algunos reportes, el agresor tenía como objetivo matar a tantos mexicanos como pudiera.