El Paris Saint-Germain le dio unas pequeñas vacaciones a su plantilla durante el paro invernal de la Ligue 1, pero para que no suban demasiado de peso, diseñaron un plan basado en GPS para mantenerlos bajo observación.
Los jugadores sólo tienen permitido subir un kilo de peso durante este tiempo de receso, por lo que el conjunto parisino armó un plan de acondicionamiento físico que monitorearán por medio de un GPS para saber el nivel de esfuerzo que realiza cada una de sus estrellas.
Tendrán permiso de desconectarse tres o cuatro días, pero deberán volver por sí mismos al trabajo físico después de eso para mantener el nivel y la musculatura, según informó el rotativo francés Le Parisien.
El club le tiene prohibido a los jugadores subir más de un kilogramo de grasa corporal, pues tienen que mantenerse en forma para volver a la acción el 5 de enero ante Rennes por la Copa de Francia, por lo que toda la plantilla estará reportando el 2 de enero de 2018.
