Por Daniel Montes de Oca | @montesdeoca11
Reza el refrán que “cuando el pobre tiene para carne, resulta con que es vigilia”.
Y esto aplica perfecto para la directiva de los Pumas y la promesa que presentamos en esta ocasión…
Manuel Pérez estuvo en el Club Universidad desde los nueve años y pasó por todas las categorías del equipo hasta debutar en Primera División a los 21, en 2012, en un juego que los auriazules perdieron ante Tigres.
Se desempeña primordialmente como delantero, pero puede jugar en el mediocampo: es rápido, habilidoso y tiene buen tiro de media distancia; sin embargo, tras conseguir el objetivo de llegar al Máximo Circuito no tuvo continuidad, pues en aquel Clausura 2012 sólo disputó 74 minutos y no volvió a ser tomado en cuenta.
Tras deambular por las filiales Universitarias buscó nuevos aires y en 2014 fue cedido al Pachuca, en donde destacó con la Sub 20, lo que le valió tener minutos con el primer equipo, sobre todo en la Copa MX. Incluso fue parte del plantel que ganó el título en el Clausura 2016, aunque prácticamente no jugó.
En Pachuca tampoco logró consolidarse, y el que fuera campeón de goleo en la Sub 20 fichó hace un par de campañas nada menos que con el América.
Con Ricardo La Volpe tuvo escasa participación, pero en una medida de urgencia, el ‘Bigotón’ metió al atacante de 24 años en el juego de la Jornada 17 frente al Pachuca cuando perdían 2-0…
Y de forma increíble, Manuel Pérez empató el partido con dos golazos que minutos más tarde serían eclipsados por el 3-2 de los Tuzos, con lo que las Águilas no clasificaron a la Liguilla.
No es ningún jovencito, se le ha señalado como indisciplinado, pero el par de joyas que regaló en el Estadio Azteca son su mejor carta de presentación y hablan del talento que tiene.
Y sí, es canterano de los Pumas, que hoy tanto predican que buscarán el resurgimiento de sus fuerzas básicas, pero a esta ‘joya’ la dejaron ir por un inadecuado seguimiento a los jóvenes que se presentan en Primera División.
La peor noticia no es que soltaron a este futbolista, sino que ahora juega en el América.
La sabiduría popular no se equivoca: “cuando el pobre tiene para carne, resulta con que es vigilia”…
