Por: Roberto Testas/ @R_Testas
El fútbol en el País Vasco, en líneas generales, dista bastante del de otras regiones de España. Los campos de barro, el frío y la fisionomía de los vascos, que son torres robustas, a diferencia de los ‘bajitos’ que copan gran parte de la península ibérica.
A raíz de este tema, los partidos en el norte de España suelen ser ríspidos, con el juego físico por bandera y en el que los pelotazos son el pan de cada día. En ese ecosistema, peloteros como Beñat, Muniain o nuestro personaje de hoy, el joven Córdoba, destacan.
El trastabillado inicio del Athletic Club esta temporada los tiene en 13° lugar de LaLiga con apenas ocho unidades en siete juegos, y tercero en el Grupo J de la Europa League con apenas una unidad fruto de un empate y una derrota en dos cotejos.
Los resultados no acompañan, y a las molestias físicas que ha acarreado De Marcos, se une la baja forma de Aduriz y la gravísima lesión de Iker Muniaín, que estaba siendo el mejor del equipo esta campaña y posiblemente se haya despedido de ella.
En este entorno desolador hay una pequeña esperanza. Hablamos del extremo zurdo Íñigo Córdoba, que con apenas 20 años, ha debutado con muy buenas sensaciones con Los Leones esta temporada.
Íñigo es un extremo zurdo, y recuerda a los clásicos extremos de antaño, pues juega a banda natural y tiene bastante empuje, mucha habilidad para superar a su marca y, al manejar bien la pierna derecha, se convierte en un delantero muy imprevisible y difícil de controlar.
Tiene un punto de velocidad importante, y en apenas 239 minutos ya provocó 11 faltas, unas cifras muy elevadas que demuestran lo difícil que es arrebatarle el balón a este joven. Aunque hemos visto poco de él, todo parece indicar que tiene esa chispa que hace a los cracks diferente, y ahora con la baja de Muniaín podría ser indiscutible en la banda izquierda de San Mamés.
La campaña pasada sólo anotó 4 goles en 32 partidos con el Athletic Club B, pero aporta bastante centrando y siendo el autor del último pase. Está por verse en qué futbolista se convierte, pero su velocidad, potencia e impecable técnica hacen pensar que es un auténtico diamante el que Ziganda y el Athletic tienen entre manos.
Tuvo dos apariciones con España Sub-19 y en la última conovcatoria de la Sub-21, Albert Celades lo tomó en cuenta, demostrando que está llamando mucho la atención y, sin lugar a dudas, aspira a ser una de las sorpresas de esta temporada en LaLiga.
