Disfrutar del futbol en compañía de tus mejores amigos es uno de los tantos placeres que nos regala la vida y poder hacerlo cada fin de semana, es lo mejor. Aunque generalmente siempre son un par de horas muy divertidas y bastante amenas, siempre hay problemas cuando se hace un equipo de futbol con tus amigos, es por ellos que hoy vamos a recordar 3 de ellos que seguramente viviste y que te harán reflexionar un poco sobre tus experiencias.
Jugar cada fin de semana, sea en sábado, domingo e incluso a media semana, es un placer enorme. Jugar futbol y demostrarle a todos los equipos de tu colonia quienes son los cracks es algo cotidiano y poder disputar el campeonato local después de una temporada, sin duda es el objetivo principal. Para llegar a ello se tienen que vivir un par de cosas ‘negativas’ y aquí vamos a analizarlas.
3.- Escoger el uniforme es un problema
Todos suelen ser fanáticos de algún club y si se pone a votación qué uniforme deben llevar, siempre suele ser un problema; tanto por el equipo al que le va cada uno o por el color, pues en la liga siempre llevan blanco, rojo, negro o azul y como esos son los ‘chidos’, ponerse de acuerdo suele ser un problema.
Si el que lleva el equipo se pone estricto y simplemente dice de a cuánto le va a tocar a cada uno, todo se resuelve muy fácil, pero si uno empieza a sugerir, a otro no le parece y tú opinas tu equipo favorito, empieza un debate constante que no tendrá fin hasta que alguien diga un uniforme neutral en el que todos puedan estar de acuerdo.
2.- Se enojan si son banca y no juegan
Ser el capitán del equipo siempre es algo complicado, porque tratas de quedar bien con todos y al final ninguno está contento. Tú eres quien va haciendo los cambios, quien escoge a los titulares y pese a que lo haces metiendo a los que ‘juegan mejor’, los que están en la banca siempre van a presionar o a enojarse porque no juegan.
Hay veces en las que el capitán se sacrificará para darle juego a todos pero si no llevan bien el tiempo o no lo pelas cuando quiere entrar, comienzan las ‘enemistades’. Si tienen algún DT que los lleve, bueno, todo se arregla, pero generalmente entre amigos no es así y por estas cuestiones hay conflictos, a menos que todos sean muy maduros.
1.- Juntar el arbitraje siempre es un logro
Este es el pan de cada partido. Todos llegan con mucho ánimo a jugar, se divierten, platican y están muy participativos, pero cuando es momento de ir a pagar el arbitraje, sea a medio tiempo o antes de empezar, la mayoría hace como que ‘la virgen le habla’ y no da su parte.
Las frases comunes son “no traigo cambio, deja que llegue el medio para darte”, “nada más tengo $10, eso me dijeron que trajera”, “a mi me dijeron que no había que traer”, “paga tú, para eso hiciste el equipo”, “yo ni he jugado, méteme y luego te doy”, “me lo gasté en mi agua, perdónamelo y te doy un trago”, etc. Estas legendarias frases siempre se usan y pese a que te prometen que te pagarán la semana siguiente, es una deuda que sólo puede ir en aumento.
