Hay que reconocer que por más que se esmere la UEFA, la Europa League no será lo mismo que la gloriosa Champions. No es lo mismo enfrentarse en la fase de grupos a la Juventus o al Real Madrid que al PAOK o al BATE Borisov, con todo respeto.
Eso lo saben muy bien en el Chelsea, que para esta campaña ve la Champions por televisión y se consuela jugando en la Europa League y en su primer partido en la fase de grupos, le tocó visitar al PAOK de Grecia, aquel equipo que le dio la vuelta al mundo porque su presidente bajó al terreno de juego con una pistola para amenazar al árbitro.
Let’s get this show on the road! 👊 #PAOKvCFC pic.twitter.com/afh4DvX3ik
— Chelsea FC (@ChelseaFC) 20 de septiembre de 2018
Pese a no ser Champions y el miedo de algún berrinche del presidente del PAOK, decenas de seguidores del Chelsea hicieron el viaje para apoyar a su equipo y ese tipo de esfuerzos merecer ser recompensados de alguna manera.
Por ello, el presidente del Chelsea, Bruce Buck, se puso las pilas y compró un montón de bolsas de papitas, las cuales repartió y entregó él mismo a cada uno de los aficionados que se dieron cita en el estadio del PAOK para agradecer el esfuerzo de viajar para estar al lado de los Blues, que en la Premier League la andan rompiendo con cinco triunfos en igual número de juegos.
Bruce Buck went over to the travelling Chelsea fans at prior to the game to offer each of them a packet of crisps.
Great gesture! 👏🏼 pic.twitter.com/g0hap6gZrx
— Absolute Chelsea (@AbsoluteChelsea) 20 de septiembre de 2018
En la cancha, Chelsea no fue espectacular, pero sumó sus primeros tres puntos al imponerse por la mínima diferencia gracias al gol de Willian a los siete minutos.