Hay Finales de Copas del Mundo que dejan marcada la vida de ciertos hombres para ser odiados o venerados. En Argentina, por ejemplo, no olvidan el nombre de Edgardo Codesal, el árbitro que pitó la Final contra Alemania en Italia 1990 y que en los últimos minutos señaló un penal, con el cual se coronaron los teutones.
No sabemos cómo será recordado Néstor Pitana, el argentino que llevará las incidencias de la Final, entre Francia y Croacia, el próximo domingo, pero por lo pronto todo es un mundo de maravilla para el silbante sudamericano, quien será el segundo en toda la historia en pitar tanto el juego de inauguración como la final.
Pitana fue entrevistado por la FIFA, con la que compartió su emoción al saber que iba a estar en la Final y que igualaría a Horacio Elizondo, el primer silbante que pitó un juego inaugural y una Final en el mismo Mundial, en Alemania 2006.
“Pocas veces me pasó algo así en la vida. Esa sensación, esa emoción. Quizás comparable con el momento en que me avisaron que iba a ser padre. Por el sacrificio, por la responsabilidad que implica. Para cualquier niño que ama el futbol, el sueño es estar en la final de un Mundial. Este equipo (cuerpo arbitral) ha trabajado mucho para llegar hasta acá, hemos logrado una de las cosas más bellas del mundo del arbitraje. Y ahora queremos culminarlo de la mejor manera”, comentó el silbante.
El silbante argentino tiene una segunda pasión, y esa está centrada en la música, por lo que fue cuestionado sobre sus gustos, en los cuales resultó bastante versátil.
“Me gusta toda la música, puedo ir desde un reggaeton hasta algo más clásico. Pero en estos momentos es una mezcla total de todos los ritmos. Es tanta la alegría que no lo puedo definir. Diría que la mezcla es tan grande que daríamos nacimiento a un nuevo estilo nunca antes escuchado”.