Por qué necesito saberlo:
El Gran Premio de Gran Bretaña terminó calientito y los duelos siguieron fuera de la pista entre Gasly y Sainz
El Gran Premio de Gran Bretaña terminó calentito entre Carlos Sainz y Pierre Gasly, quien en plena entrevista le reclamó al español por apretarlo de más durante la carrera. Ambos pilotos de encontraron en el corralito mientras daban entrevistas a las televisoras y el francés empujó ligeramente el volante de Ferrari mientras explicaba la errónea estrategia de Ferrari. En pocas palabras, ahora el que sí intimidó a Sainz fue Gasly.
El reclamo de Gasly a Sainz en el corralito
Sainz se encontraba con la prensa de habla hispana cuando Pierre Gasly se acercó al español, lo empujó ligeramente con la mano izquierda y sin dejar de caminar lo apuntó con el dedo índice mientras le reclamaba: “Don’t squeeze me like that, Carlos (No me aprietes así, Carlos)”.
Sainz, lejos de engancharse y sin mirarlo, se burló del francés ante los micrófonos: “Pobrecito”. Tras reírse irónicamente durante algunos segundos, Sainz retomó la pregunta al asegurar que el safety car condicionó su carrera además de que el ritmo de Ferrari aún debe desarrollarse.
Después, Diego Mejía, periodista de Fox Sports, le cuestionó sobre el reclamo de Pierre Gasly. “No vimos en qué momento lo apretaste ¿cuándo pasó?”. El piloto español dijo desconocer el motivo del reclamo del francés: “Yo tampoco lo vi”, mencionó el español.
¿En qué momento pasó el duelo entre Sainz y Gasly?
Carlos Sainz terminó en el décimo sitio mientras que Pierre Gasly terminó décimo octavo, pero tuvieron un duelo por el décimo sitio entre las vueltas 45 y 46, y se le escucha al francés precisamente reclamar la forma en la que Sainz lo apretó, lo que dio pie a gritos del galo al estilo de Yuki Tsunoda, sin embargo, quien le echó a perder la carrera fue Lance Stroll, tras un contacto en la parte trasera, del lado derecho.
El contacto sucedió apenas superada de la zona de la entrada a pits, por lo cual el francés dio una vuelta casi a rueda antes de entrar a los pits sólo para que el auto fuera guardado en el garage, pues la reparación requería una importante inversión de tiempo. Como dijo Carlos Sainz, “pobrecito Gasly”.