En los últimos meses la vida del ex quarterback, Peyton Manning, sufrió una serie de altibajos notables. Con los Broncos de Denver levantó el trofeo del Super Bowl 50 y poco después se le acusó formalmente de haber utilizado hormonas del crecimiento para mejorar el rendimiento. Después de una ardua investigación, la NFL determinó que en mariscal de campo es inocente según los reportes de AP.
Durante su última temporada como profesional, el dorsal número 18 ayudó a que el equipo de Colorado consiguiera su tercer campeonato en la historia, pero los rumores acerca de su dopaje crecieron rápidamente. Junto con su esposa Ashley, Manning fue acusado de utilizar sustancias prohibidas en 2005 durante su estancia con los Colts.
El Guyer Institute de Indianapolis fue la clínica en la que la NFL realizó las investigaciones, ya que, además del ex jugador de los Broncos, otros deportistas estaban acusados por recibir las drogas en el recinto anti envejecimiento. Según la cadena Al Jazeera, la hormona del crecimiento humano se envió a casa de Peyton para que se recuperara más rápido de sus múltiples lesiones de cuello.
Su esposa, según el medio antes mencionado, fue la que mandó los mensajes para que llegara la sustancia a su hogar. Por dicha acusación, Manning mostró su indignación al mencionar que los reportes eran “completamente inventados y sólo basura”, ya que la situación involucró a su familia y a su carrera como profesional.
Con dos anillos de Super Bowl, uno con los Colts y otro con los Broncos, Manning pasará a la historia del futbol profesional americano como el quarterback con más pases de touchdown (539), más victorias como titular sin contar Playoffs (186) y más yardaje acumulado por pase (71,940).
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